El presidente dimisionario de la FIFA, Joseph Blatter, podrá disfrutar del apartamento propio del cargo en Zúrich hasta la elección de su sucesor, el 26 de febrero de 2016, pero por contra no podrá conservar su teléfono móvil, según indicó este martes una fuente próxima al dosier.
Blatter, a pesar de estar suspendido, "está todavía protegido por su contrato de trabajo", precisó a la AFP dicha fuente, que prefiere permanecer en el anonimato.
La cámara de enjuiciamiento del Comité de Ética de la FIFA suspendió el lunes por ocho años a Sepp Blatter de toda actividad ligada al fútbol debido al controvertido pago de 1,8 millones de euros efectuado en 2011 al vicepresidente de la FIFA Michel Platini por un trabajo de asesoramiento realizado en 2002 sin que mediase contrato escrito.
Sin embargo Blatter no podrá acceder más a su teléfono móvil de trabajo ni a su correo electrónico.
Pero ello no le impide recibir, como establece la legislación suiza sobre los contratos de trabajo, su salario así como conservar su coche y su apartamento en Zúrich.
Unos 'privilegios' que dejará de disfrutar el 26 de febrero como muy tarde, fecha de la elección de su sucesor en el congreso extraordinario de la FIFA que tendrá lugar en Zúrich.
