Según el testimonio de Jonathan Moss, árbitro al que Mourinho visitó en el tiempo de descanso en el partido ante el West Ham, el entrenador portugués le llamó "puto endeble".
Así lo recoge el documento publicado por la Federación Inglesa en el que explica las razones por las que sancionó a José Mourinho con un partido sin poder entrar en el estadio y con 40.000 libras de sanción.
El relato del colegiado del silbatero es el siguiente:
"Cuando mis colegas y yo entramos al túnel de vestuarios en el descanso del partido vimos que el señor Mourinho nos estaba esperando claramente agitado y empezó a preguntarnos agresivamente sobre mis decisiones en la primera parte. Mejor que hablar publicamente con él, le dije que entrase a nuestro vestuario escoltado por Simon Sutton, encargado de seguridad del West Ham. El señor Mourinho me preguntó por una falta, un fuera de juego y gol fantasma. Le dí algunas respuestas a sus preguntas. Después le pedí que dejase mi vestuario. Me dijo que no. Se lo volví a pedir. Después de volver a decirme que no le dije al señor Sutton para que escoltase a Mourinho fuera del vestuario. En este momento el señor Mourinho se volvió más agresivo. El gritó que éramos unos árbitros débiles, Wenger -entrenador del Arsenal- tiene razón sobre vosotros... sois unos putos débiles. Le dije al señor Mouirnho que no tomara asiento en el área técnica en la segunda parte debido a sus acciones".
