El delantero de la selección de Holanda, Arjen Robben, podría enfrentar una sanción tras reconocer que fingió un penalti durante el partido de Octavos de Final contra México, cuando antes de finalizar el primer tiempo cayó dentro del área tras una barrida de Miguel Layún.
A pesar de que el árbitro consideró que había sido una jugada limpia y por lo tanto no hubo pena máxima, el goleador del Bayern se disculpó por intentar engañar al silbante al buscar hacer contacto con la pierna del defensor mexicano.
El Código Disciplinario de la FIFA establece que "cualquiera que viole los principios del juego limpio 'podría enfrentar sanciones, mientras que el artículo 96 señala que las grabaciones de audio y video son admisibles como medios de prueba, es decir, que las declaraciones de Robben y las imágenes de la jugada mencionada podrían hacerle enfrentar una acción disciplinaria al jugador holandés.
Mientras tanto, el técnico de México, Miguel Herrera, calificó a Robben de tramposo y criticó al árbitro portugués Pedro Proenca por su actuación. Sin embargo, el goleador holandés insistió en que la jugada del penalti que convirtió su compañero Klaas-Jan Huntelaar, y que les permitió ganar el partido en tiempo añadido, había sido una falta clara de Rafael Márquez.
