Sascha Burchert, guardameta del Valerenga, no podrá olvidar en su vida el partido que disputaba su equipo el pasado viernes ante el Start, correspondiente a la jornada 25 de la liga noruega. El meta alemán cometió un tremendo error que supuso el gol del empate de los visitantes (1-1).
Corría el minuto 65 de partido cuando el árbitro señalaba una falta en el centro del campo en contra del Valerenga, que en ese instante vencía 1-0. En una imagen poco habitual, Hakon Opdal, guardameta del Start, abandonaba su área para ejecutar una falta que tuvo el final más inesperado.
Desde la línea que el terreno de juego, Opdal pateaba la pelota y la colgaba al área en busca del remate de un compañero. El balón, sin embargo, no encontraba la dirección que buscaba y se dirigía mansamente hacia el guardameta del Valerenga. Incomprensiblemente, Burchert, solo y sin oposición de ningún rival, caía en un exceso de confianza y la pelota terminaba colándose entre sus brazos. Un error terrible que privaba a su equipo de la victoria ante un rival que lucha por la permanencia.