Al igual que en la primera fecha Martín Cardetti, técnico de Uruguay de Coronado, salió disconforme con la labor arbitral tras la derrota en casa frente a Herediano.
Todo a raíz de la jugada de generó el único gol del partido y en donde el balón rebotó en la mano de Kenny Cunnigham, quien al final terminaría convirtiendo la única anotación del compromiso.
"La mano fue muy clara, todo el mundo la vio, el único que no la vio fue el árbitro (Pedro Navarro), con los clubes grandes pasan estas cosas, parece que quieren que ganen ellos", expresó el técnico argentino.
"Hay que estar tranquilos y pensar en el próximo partido", añadió.
Uruguay, que acumula dos caída en el presente certamen, visita el próximo miércoles a Liberia por la tercera fecha.