El escándalo de corrupción que ha salpicado a la FIFA durante varios días tomó un nuevo giro este lunes. Y es que el diario estadounidense "The New York Times", revela que el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, sería el responsable de haber pagado 10 millones de dólares a Jack Warner en tres transferencias tras la adjudicación de la Copa del Mundo Sudáfrica 2010.
El pago de este dinero es uno de lo ejes centrales de la Fiscalía que busca acabar con la corrupción en el fútbol.
El señalamiento de este personaje, acerca aún más al presidente Joseph Blatter, sobre quien hasta el momento no pesa ninguna acusación. Valcke es la mano derecha del máximo jerarca del fútbol mundial.
Danny Jordaan, jefe de la candidatura de Sudáfrica y presidente de la federación de fútbol local, ya ha explicado que el dinero fue destinado para el desarrollo del fútbol en el Caribe y no como parte de los sobornos que indican las autoridades.
Valcke es el segundo hombre en importancia de la FIFA desde el año 2007. El soborno de los $10 millones se pagó en tres tractos entre enero y marzo del 2008 por un ejecutivo Top de FIFA no identificado, según la acusación y ese hombre sería el secretario general.
Sin embargo, no está claro si Valcke sabía que el dinero pagado era un soborno. The New York Times recibió una respuesta de Valcke antes de publicar su noticia.
"El señor Valcke, dijo en un breve correo electrónico que no había autorizado el pago y no tenía el poder para hacerlo", cita parte del artículo.
Según Delia Fischer, portavoz de la FIFA, los pagos fueron validados por Julio Grondona, quien ya murió.
Valcke no asistirá el sábado al partido inaugural del Mundial femenino en Canadá, como consecuencia de la situación de crisis que vive la organización, anunció la Federación Internacional este lunes.