El jugador, de 41 años, señaló que el motivo por el que Luis Fernando Fallas solicitó que fuera separado fue porque supuestamente puso en su contra el camerino. Esto lo niega Barrantes y afirma que todo se dio tras la derrota 1-0 ante Sporting.
"Tuvimos una reunión con él (Luis Fernando Fallas) tras el partido ante Sporting (derrota 1-0 el 30 de septiembre) y no estuve de acuerdo ante las palabras que él dijo. Con mucho respeto levanté mi mani y frene a mis compañeros y cuerpo técnico hice ver mi desacuerdo y tal vez ese fue el detonante, porque no le gustó lo que expresé. En otra reunión posterior dijo que había el camerino en su contra, cuando no fue así", comentó Barrantes.
El futbolista mantiene en que nunca le faltó el respeto al entrenador porteño y que mucho menos tenía control sobre sus compañeros.
"Nunca tuve un dominio del camerino, solo soy un líder, era el capitán y tengo muchísima experiencia. Quieran o no y lo acepten o no, algunos compañeros se me acercaban y me pedían consejos. Tal vez hablaban más con el capitán que en ocasiones con el entrenador o el cuerpo técnico, pero no creo que le estuviera pasando por encima a un superior".
Michael también confesó que las diferencias con Luis Fernando Fallas vienen desde la etapa en que coincidieron en Cartaginés, de donde salió por recomendación técnica, pero que no guarda ningún tipo de resentimiento.
"De mi parte no arrastro nada (resentimientos), he sido muy profesional, como siempre. Ahí (Cartaginés) se dio un pequeño encontronazo, pero don Leonardo Vargas o su hijo pueden responder lo que pasó y saben bien cómo estaban todas las situaciones. Creo que puede haber un poco de cola de eso por mi salida del Cartaginés, que no fue la mejor y también se dijeron muchas cosas que no fueron ciertas", finalizó Michael Barrantes.
Seguirá como futbolista por lo menos seis meses más
Michael Barrantes tiene claro cómo desea finalizar su carrera y no será mediante un despido.
"Se está tratando de mostrar que Michael es problemático y por eso salgo a aclarar todo y a limpiar mi nombre en el final de mi carrera. Me han querido ensuciar", expresó.
El volante también confesó sus planes para el futuro, una vez cuelgue los tacos.
"No es capítulo cerrado lo del Puntarenas FC, porque no sé qué va a pasar mañana. Lo que sí es que no me veo pronto siendonosla técnico de PFC. Tengo claro lo que quiero para mi futuro, me estoy preparando y aunque tenga la licencia A, quiero crecer más y ser más profesional en todos los campos. Voy a quemar etapas y me quiero tirar al agua dirigiendo a un primer equipo apenas me retira", sentenció.
