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El campeonato nacional terminó con una eutanasia deportiva. El único ruido que se escucha es el de los hinchas saprissistas felices con la Copa 39.
El logro de Saprissa es irrefutable porque las estadísticas lo avalan. Podría pensarse que ese cetro vino a levantar el futbol de Costa Rica por los sorprendentes números de este equipo, 22 victorias en 26 partidos, pero es solo un nuevo archivo para el museo en el cual estamos metidos.
“Muerto el perro se acaba la rabia”, era la frase cliché. Traduzcamos: “Fuera Rodolfo Villalobos y todo cambiará”. Pero todo sigue igual. La palabra igual es muy generosa: está peor.
El futbol vive muchos momentos de farsa en el camino, caos, colapso, genitales, pleitos, intimidaciones: al final risas y abrazos en la oscuridad.
Los miembros de la Federación, que son los organizadores, son los mismos de hace un par de décadas, solo que tienen diferente nombre. Cada presidente de club pugna por el beneficio de su equipo apoyados en su coraza protectora aunque con armas diferentes; usando artimañas, palabras soeces, ataques a través de una prensa complaciente repicando cada palabra malévola sin confrontar la esencia del futbol.
¿Quién o quienes lideran esta telaraña?
La Federación está integrada por los presidentes de los equipos de primera división. En la UNAFUT, encargada de diseñar y organizar los campeonatos de esta máxima categoría, los integrantes son los mismos presidentes de los clubes.
Saben todos de futbol? Cuando existe ese vacío en la médula presidencial de la organización, uno o dos toman el control. Así vemos como los que se sienten los ungidos emergen como los caudillos.
Presidentes - entrenadores - dueños de equipo dentro y fuera de la cancha, muestran los dientes increpando los árbitros porque consideran no dejan ganar al equipo que representan. Lanzan frases que lejos de ofrecer cambios estructurales producen roces y pleitos. Gritan, vociferan y de esa forma llenan el ego personal y dejan evidencia que son los líderes porque tienen el rótulo de sabedores de futbol.
Me imagino a Florentino Pérez, Presidente del Real Madrid, sentado en el banco dirigiendo a su equipo como entrenador y saliendo a la prensa disparando indirectamente contra los que no saben de futbol.
Cómo se sentirán los presidentes del resto de equipos, el presidente de la Segunda División Sergio Hidalgo, el representante de LINAFA Jorge Hidalgo, ambos con larga experiencia en el futbol o Silvia Bolaños Presidenta del MPF también integrantes de la Federación. Qué pensará el presidente Osael Maroto, cuando mira que solo lo nombraron para figurar en un mundo que desconoce.
Soy ingenuo, iluso será la palabra acertada. Creí que se enderezaría el futbol nacional con los nuevos federativos, pero su gestión, hasta ahora, es seguir gestionando el pasado distorsionándolo en cada acto, logro y expectativa expresado en cada detalle. Todo sigue como un techo con goteras, errores de larga duración y donde lo que menos buscan es corregirlos por los intereses personales.
Saprissa logró su campeonato 39. Una victoria táctica bien ganada, porque es el tricampeón nacional, pero esa victoria táctica lograda en la cancha es una derrota estratégica para el futbol nacional en el corto, mediano y largo plazo porque el nivel gerencial sigue en deuda.
** El autor tiene una Maestría en Comunicación. Licenciatura en Periodismo y Educación Física. Además es entrenador de Futbol y Baloncesto.