A escala geológica, la isla “ya ha desaparecido del mapa”, dice Boubou Aldiouma Sy, profesor de geografía de la universidad local.
“Es un fenómeno natural, independientemente de la existencia del ser humano (...) El rol del hombre es acelerar el proceso”, afirma. No es la única. En África Occidental, la erosión hace retroceder la costa 1,8 metros anuales de media, según un informe de la Organización Meteorológica Mundial de 2019. El mar crece de 3,5 a 4 mm por años, ligeramente por encima de la media mundial, según el último informe de los expertos climáticos de la ONU.
Diario La Nación Argentina