Mavys Álvarez es la cubano que tuvo una relación con Diego Armando Maradona cuando tenía tan sólo 16 años. Álvarez conoció al astro argentino cuando este se encontraba en Cuba para seguir un tratamiento de desintoxicación por su adicción a las drogas. Y en el programa América Noticias de la cadena América TeVé del canal 41 de Miami contó cómo se dio la relación.
La joven de 16 años conoció a la estrella del fútbol el 1 de septiembre de 2000, cuando estaba dando un paseo por la ciudad de Matanzas, un hombre la detuvo y le propuso que acompañara a Maradona, que no estaba atravesando su mejor momento después de que su pareja por aquel entonces, Laura Cibilla, regresara a Argentino después de una discusión.
"Al principio pensé que quien me proponía eso estaba loco. Era un cubano. Después supe que era el socorriste del hotel. En el coche nos miraba Carlos Ferro Viera, amigo de Maradona. Estuvieron más de una hora convenciéndome de que era importante ayudar a Diego, que era una figura mundial, amigo de Cuba y que estaba deprimido. Y finalmente acepté", contó Mavys.
"En el hotel me recibió Guillermo Coppola, un amigo de Maradona. Ahí me asusté muchísimo porque estaba solo con una toalla y pensé lo peor. Unos minutos después me recibió Maradona. Conversó mucho conmigo y me dio confianza. Me cayó bien. Nunca se propasó. Me invitó junto a mi familia al día siguiente a cenar al palacio Depont. Yo era una niña. No tenía maldad ninguna. Él era un extranjero, un rico y se había fijado en mí. No podía decirle que no. Era un privilegio ser su novia", añadió.
La vida de la cubana cambió para toda su vida y pasó de vivir en estrecheces económicas a hacerlo rodeada de lujo. Pero aquello también provocó que terminara enganchada a las drogas y al alcohol.
Al poco tiempo de relación Mavys Álvarez se fue a vivir con Maradona a La Pradera, en contra de la posición de sus padres.
"Mi mamá no lo tomó nada bien. Tampoco mi papá. Pero a esa edad uno suele ser muy rebelde y no tener en cuenta el criterio de los padres. La vida con Maradona era muy loca: fiestas, discotecas. Me llevaba a comer... Nunca imaginé que después me metería en las drogas de la que me costó tanto trabajo salir", continuó.
"Al cabo de estos años me da pena de mí misma saber que tenía 16 años y fui parte de todo eso. Pero fue una experiencia más que tuve en la vida. No escogemos lo que nos taca vivir. Simplemente me dejé llevar", añadió.
A pesar de la diferencia de edades y de que la joven era menor de edad, el argentino no infringíos la leyes cubanas. La directora de Cubalex, una organización que defiende y promueve los derechos humanos en la isla, Laritza Diversent, aseguró en el programa América TeVé que, "en Cuba no se criminalizan las relaciones con menores de edad. A partid de los 14 años las niñas pueden casarse con el consentimiento de sus padres. Las relaciones sexuales sólo constituyen delito si se realizan bajo estupro, es decir, si el adulto utiliza el engaño o el abuso de superioridad sobre el menor".
Álvarez también aclaró que nunca ejerció la prostitución y que, "él me cayó bien, me deslumbró. Fue una relación consentida".
El amor de Maradona por la cubana fue tal que según reveló Teleshow de Infobae, el argentino le pidió a sus asistentes le hicieran agujeros a la maleta para poder sacar a la joven de la isla. Y es que el astro del fútbol siempre viajaba con maletas de metal que eran las que utilizaba habitualmente para trasladar sus tacos, balones y demás enseres voluminosos en sus viajes.
Finalmente, Guillermo Coppola consiguió reunirse con Fidel Castro, con quien Maradona mantenía una muy buena relación y consiguió el permiso para que Mavys saliera de Cuba, eso sí, con una única condición de que la joven volviera en menos de 20 días.
MÁS INFORMACIÓN