Remi Garde
Cuando llega un nuevo entrenador, es normal esperar un 'rebote' en el que los jugadores obtienen resultados con una nueva vida.
Pero ese no fue el caso de los fanáticos de Aston Villa, que esperaron dos meses para ver su primera victoria con Garde, quien estaba fuera de su alcance en la Premier League.
Garde fue nombrado en noviembre de 2015 con la abrumadora tarea de mantener al club de los Midlands en la Premier League.
Se marchó cuatro meses después tras una racha de 12 derrotas en 13 partidos.