Camino de la Muerte, Bolivia
Considerada la carretera más peligrosa del mundo, se cree que el Camino de los Yungas en Bolvia se ha cobrado hasta 300 vidas al año en su pico más mortífero.
Con caídas de hasta 2,000 pies alrededor de sus curvas cerradas y caminos estrechos, el 'Camino de la Muerte' también está arruinado por desprendimientos de rocas y deslizamientos de tierra que pueden inquietar a todos menos a los conductores más experimentados.
Construida en la década de 1990, la carretera ha demostrado ser un gran negocio para los adictos a la adrenalina, y los operadores turísticos se abalanzan sobre su temible reputación.
Los ciclistas asedian el desafío de navegar por su asfalto mal tratado, pero se dice que al menos 20 han muerto desde 1998.
En promedio, también se cree que 26 vehículos caen en picado por el borde cada año, una estadística desalentadora que llevó a la construcción de una nueva carretera cercana para desviar a los viajeros de su camino.