Sara Carbonero recupera la ilusión con un empresario español. Así lo destaca la revista Diez Minutos. La periodista, que acaba de firmar su divorcio de Iker Casillas, vive una época de importantes cambios en su vida.
Carbonero consiguió una separación de mutuo acuerdo y tras seguir manteniendo buena relación con Iker, padre de sus hijos, con quien ha acordado un régimen de visitas muy flexible para que pueda ver a los niños prácticamente cuando quiera, aunque la custodia la tenga ella.
Y qué mejor plan para comenzar esta nueva andadura que tomarse un merecido respiro en las Islas Canarias. Hace unos días, Sara Carbonero, que sigue centrada en su trabajo en la radio y en su firma de moda, puso rumbo a Lanzarote desde Madrid en un vuelo de Air Europa junto con su comadre Isabel Jiménez, el marido de ésta, Alejandro Cruz, los dos hijos de la pareja y la persona encargada de cuidar a los pequeños.
Se instalaron en la casa del empresario
Al llegar a Lanzarote, les esperaba una zodiac privada para trasladarles a Isla Graciosa, donde les recibió José Luis, un amigo íntimo de Isabel y de su marido, el mejor apoyo de Sara en su separación, desde hace muchos años y en cuya casa de veraneo se instalaron coincidiendo con otras dos parejas amigas.
No hay fotos de besos ni nada por el estilo, pero asegura la misma publicación que la sintonía entre Sara Carbonero y el empresario es total y absoluta. Se habla incluso de una tarde romántica pasada en el jardín de la casa en la que se quedaron.