Queda poco más de un mes para las fiestas de fin de año, o lo que es lo mismo, una de las temporadas de mayores gastos en regalos, comidas y viajes. Y en este 2022 de fuerte inflación hay que hacer muchos cálculos además de mantener la cabeza fría.
Especialmente a la hora de aceptar una tarjeta de crédito de una tienda con un buen descuento que haga más atractiva la compra.
El motivo es que dadas las subidas de tipos de interés de la Fed, que ha pasado del 0%- 0.25% a principios del año al 3.75%-4% en el momento de esta publicación, las tasas medias de las tarjetas específicas de comerciantes (que varían según la puntuación de crédito de sus titulares) se han disparado.
Las tasas medias de interés anual (APR) de este año han llegado ya a un récord: 26.7% frente al 24.35% del año anterior, según el estudio anual sobre hecho por CreditCards.com.
“Y es aún más elevado en tarjetas como la de Speedway Rewards Mastercard que sube hasta el 30.74%, la de Kroger Rewards Elite Mastercard y tarjetas de nueve marcas a filiadas a Kroger aunque algunos clientes reciben tasas más bajas”, explica Ted Rossman analista senior de Bankrate.com y CreditCards.com, quien detalla que han encontrado dos docenas de tarjetas (la mayoría de uso único en la tienda que la ofrece) con APR del 29.99%.
Esta es la tasa que se aplica al balance que se arrastre de mes a mes en Big Lots, Burlington, Dock´s Sporting Goods, Discount Tire, Jared, Kay Jewelers, QVC, TJX, Wayfair entre otras.
Una acumulación de deuda que asusta
Y la cuenta es la siguiente, si se carga US$1,000 en esas tarjetas y se paga solo el mínimo mensual a una tasa del 29.99% se tardará 51 meses (más de cuatro años) en pagar la deuda y el coste en intereses será de US$775.
Aunque muchos estados consideran que por encima del 25% los intereses son usura y se prohíben, una sentencia del Tribunal Supremo abrió la puerta a cargar intereses por encima de estos en caso de que no estuvieran prohibidos por el estado donde se localice el banco emisor, como Delaware Dakota del Sur o Utah.
Además, la estructura variable de los intereses y la forma en la que suben hace que aunque los nuevos clientes tengan estas tasas tan altas es posible que que sea aún un interés más elevado el que pague quien tenga la tarjeta desde hace más tiempo. Es conveniente conocer la tasa que se carga en cada momento.
Tarjetas como Amazon Secure, Military Star Card y Costco Anywhere Visa de Citi ofrecen tasas más bajas y en general estas pueden variar dependiendo del crédito del cliente.
La situación en las tarjetas generales es algo mejor pero también están a niveles récord elevados. “Hemos compilado tasas de interés en tarjetas desde 1985 y ahora mismo tenemos la mayor media nacional que hayamos visto, un 19.04%”, expone Rossman.
Este año las subidas de las tasas de interés — que no han acabado aún— pueden costar a a los acreedores en tarjetas de crédito de tiendas unos US$1,600 millones en cargos de intereses en caso de que solo se pague el mínimo mensual, según los datos de Experian sobre esta deuda.
Para Rossman el encarecimiento del que es desde siempre el crédito más caro “subraya la importancia de pagar la deuda de la tarjeta y evitar arrastrar balances”.
“Se que es más fácil decirlo que hacerlo”, admite.
Balances récord
Sobre todo cuando se está usando el crédito de este dinero de plástico a niveles casi récords. Según el último informe de la Reserva Federal de Nueva York, los consumidores han elevado el balance de sus deudas en tarjetas un 15% en lo que va de 2022, el mayor crecimiento anual en 20 años.
La inflación, el crédito, “todo está relacionado”, dice Rossman que añade que el 60% de quienes arrastran balances de mes a mes los han tenido por lo menos un año. Eso es 10 puntos porcentuales más que el año pasado. La deuda de tarjetas es persistente por eso conviene calcular si decir que si a una nueva línea de crédito de una tienda.
Casi siete de cada 10 personas aceptan las tarjetas cuando se les ofrece en una tienda y no todo el mundo se da cuenta de las implicaciones de ello por las prisas y la confusión del momento, del hecho de que se está abriendo una línea de crédito nueva y a qué coste. Normalmente lo que queda grabado en el cliente es el porcentaje o la cantidad de descuento que se hace con la compra.
La recomendación es no precipitarse a la hora de abrir estas tarjetas, asegurarse que se compra lo suficiente en esa tienda en particular como para justificar la línea de crédito y los ahorros o la devolución de dinero si la hay y pagar mensualmente el balance. En caso de que no se pueda siempre queda la alternativa de hacer una transferencia de balance a una tarjeta con un 0% durante 18 o 21 meses o incluso pedir un crédito personal para consolidar la deuda que con un buen crédito puede rondar el 6% en varios años, muy lejos del crédito más caro del dinero de plástico.
Fuente: Yahoo Finanzas