Un nuevo escándalo ha salido a la luz e involucra a la Selección mexicana de 2010, en los últimos amistosos jugados aquel año.
Efraín Flores, entrenador interino tras la dimisión de Javier Aguirre luego de la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, y Néstor de la Torre, contaron el episodio de la "Fiesta de Monterrey".
Luego de la participación en la Copa del Mundo 2010 la actividad del seleccionado mexicano se redujo a cuatro amistosos antes del cierre de año. Primero empataron con España 1-1, el 11 de agosto, en el Estadio Azteca. Luego vino una doble jornada: derrota ante Ecuador por 2-1 en el Estadio Omnilife de Chivas, el 5 de septiembre; y triunfo ante Colombia por 1-0 el 8 de septiembre en el Estadio Olímpico de Tigres. En año finalizó con un empate 2-2 ante Venezuela el 13 de octubre en el Estadio Olímpico Benito Juárez. Pero "la fiesta de Monterrey" ocurrió después del partido ante el combinado cafetero, en la madrugada del 9 de septiembre.
El periodista David Medrano entrevistó para su podcast al entrenado interino Efraín Flores y al director deportivo de la FMF, Néstor de la Torre; ambos confirmaron lo sucedido.
“Se van de desmadre. Meten 26 mujeres. Revisé todas las cámaras, entonces vi todo”, recuerda De la Torre. Y agrega haberse enterado a la mañana siguiente cuando llega a su oficina en Ciudad de México cerca del mediodía: “llegando a mi oficina, me siento y empiezo a ver los periódicos. Bronca fuerte. Yo no me di cuenta de nada. Y entonces había gente que me decía ‘yo no fui’”. El ex directivo también contó que habló con todos y cada uno de los implicados y les hizo saber qué castigo le impondría a cada uno por violar algunos puntos del reglamento que tienen los futbolistas.
Los jugadores habían organizado una fiesta en la que estuvieron jugadores como Rafael Márquez, Gerardo Torrado, Guillermo Ochoa, Pablo Barreram Giovani Dos Santos, Francisco ‘Maza’ Rodríguez, Javier Hernández, Héctor Moreno, Enrique Esqueda, pero los más recordados son Efraín Juárez y Carlos Vela, quienes se fueron suspendidos por seis meses y Carlos Salcido, con el famoso caso de Yamile.
Efraín Flores dio cuenta que, finalizado el partido ante Colombia, volvieron todos juntos al hotel y que él fue mesa por mesa agradeciendo la presencia de los jugadores en la jornada de amistoso y anunciándoles que a partir de ese momento la concentración estaba terminada, que cada uno podía hacer lo que le quisiese. Flores dijo que se despertó a la mañana siguiente para tomarse un vuelo a Guadalajara y que se presentaría 48 horas después a trabajar, con lo que se encontró con el problema en ese momento.
También dijo, al igual que De la Torre, que los jugadores no avisaron nada ni pidieron permiso. Si bien la concentración se había dado por terminada hay un código de conducta que no se puede romper en ningún momento. Flores contó que Rafa Márquez le había confesado que el grupo estaba atravesando problemas que arrastraban desde Sudáfrica y que no habían podido solucionar con los directivos de Femexfut.
Antes del último enfrentamiento ante Venezuela en Juárez el entrenador les preguntó a los jugadores por que habían hecho la fiesta y la respuesta habría sido la misma que le había contado Rafa Márquez, las discrepancias con la directiva de la FMF. "No se acercaron a hablar porque el orgullo (tanto de directivos como de jugadores) a veces puede más que la cordura y la sensatez".