Gangubai Kathiawadi es un drama hindú inspirado en un caso real tiene un poco de todo: música, crimen, y un fuerte mensaje sobre la lucha por los derechos de las trabajadoras sexuales.
Gangubai ha demostrado el valor de su historia a lo largo de un mes, pues desde su estreno el 26 de abril de 2022, la cinta no ha dejado el top 10 de la plataforma Netflix en más de 25 países, entre los que se incluye Canadá, Reino Unido, Sudáfrica, Australia, México y los Emiratos Árabes Unidos, y ocupó el puesto número 1 en nueve de ellos.
¿DE QUÉ TRATA GANGUBAI KATHIAWADI?
La historia nos muestra la vida de Ganga, una mujer jóven con el sueño de convertirse en actriz de cine, y que para lograr su ambición decide fugarse con su novio, cuyo tío es un director cinematográfico. Al llegar al lugar termina por descubrir que quien decía ser su amado, en realidad la había vendido a un burdel, donde a pesar de resistirse termina siendo prostituida y maltratada constantemente.
Tras rebelarse un día de su madama, esta decide vengarse dándole a Ganga un cliente con trastornos violentos, y aún cuando grita por ayuda, termina en el hospital por un largo periodo de tiempo. A partir de este punto decide buscar al líder de la mafia de la región, un hombre al que incluso la policía teme, y quien decide llamarla su ‘hermana’, ayudándola a prosperar y asumir el burdel tras la muerte de su madama.
Conocida ahora como Gangubai, la reina de la mafia, comienza una campaña política en las elecciones vecinales de Kamathipura con el fin de poder pelear por los derechos de todas las mujeres prostitutas, quienes eran marginadas y rechazadas por el resto de la sociedad. Pronto Gangubai se gana una lista grande enemigos pero también de aliados que la ayudarán a transformar la vida de muchas mujeres.
¿POR QUÉ ES TAN POPULAR ESTE DRAMA HINDÚ?
Resulta difícil imaginar que cualquier espectador no se sienta conmovido por esta historia, pues tiene momentos crudos llenos de valentía y empoderamiento para un sector que constantemente es atacado por toda la comunidad, al grado de exigirles que se fueran de su hogar. El simple hecho de que las hijas de algunas mujeres del burdel fueran golpeadas por su profesora y echadas del colegio sólo por su procedencia, es más que un claro ejemplo de la marginación social en que se ambienta la película.
Hay un discurso completo durante la parte final del filme, en el que Gangubai reflexiona acerca de los derechos que todas ellas tienen de soñar por un futuro mejor, donde el hecho de ser una prostituta no es algo de qué avergonzarse, y además de todo, está dispuesta a luchar por el derecho de vivir con dignidad dentro de la sociedad.