Una historia digna de una novela es la que protagonizó un ciudadano inglés, luego de terminar con un lazo de amor de 10 años con su familia, para irse con una mujer ucraniana que había conocido hace solo 10 días.
Todo partió cuando a Tony Garnett, un guardia de seguridad de 29 años, se le ablandó el corazón y decidió ayudar a la joven ucraniana Sofiia Karkadym, que contactó en redes sociales para darle refugio e invitarla a vivir a su casa, junto a sus dos hijas y su mujer Lorna, quien, ya sabemos por qué, no estuvo muy convencida de tanta generosidad.
“Esto empezó con un simple deseo mío de hacer lo correcto y darle un techo a alguien que lo necesite, un hombre o una mujer”, contó el amable sujeto al diario The Sun, luego de inscribirse en el plan del gobierno británico para darle refugio a las personas que se vieron obligadas a dejar Ucrania, tras el conflicto bélico con Rusia.
El diario inglés relató que “la llegada de Sofiia inmediatamente provocó tensiones en la pareja y, pese a las objeciones de Lorna, para hacer espacio, Tony trasladó a su hija de seis de su habitación a un camarote con su hermana de tres”.
Y al parecer, el amor fue a primera vista. Así lo confesaron sin ningún tapujo los tortolitos para contar del insólito flechazo extramarital, el cual se incrementó porque hablaban el mismo idioma, mientras que la esposa y traicionada dueña de casa no podía entender nada de la conversación.
“Es obvio que con Sofiia hicimos ‘clic’ desde el inicio. Yo hablo un poco de eslovaco y éste no es muy diferente al ucraniano, entonces pude entenderla en su lenguaje; eso empeoró las cosas porque Lorna no sabía de qué estábamos hablando. Sofía y yo nos sentábamos a conversar, tomábamos un trago y veíamos la televisión con subtítulos en ucraniano, a veces después de que Lorna se había ido a la cama”.
“Nos llevábamos muy bien, pero en ese momento no era más que eso, aunque puedo ver por qué Lorna comenzó a sentirse celosa y resentida con ella”, agregó
Además, conto detalles cuando salían a pasear los dos solos. “Hablábamos y reíamos mientras mirábamos la ciudad. Yo sabía que algo estaba pensando entre nosotros y Sofiia sentía lo mismo, era algo que ninguno de nosotros podría detener”, reveló el hombre, de lo más natural y sin ningún remordimiento, incluso dando detalles íntimos de lo que ocurrió después, cuando la pasión ya estaba desatada.
“En casa buscábamos excusas para tocarnos y rozarnos, era muy coqueto pero en esa etapa no pasaba nada más”, continúa, “aunque era bastante inocente, estaba causando discusiones”.
“Si ella se va, yo me voy”
“Lorna comenzó a ponerse muy celosa y estaba teniendo grandes discusiones con Sofiia, preguntándole por qué estaba conmigo todo el tiempo; el ambiente se estaba poniendo muy malo y Sofiia me dijo que no sabía si podría seguir viviendo con nosotros en estas circunstancias”.
“Llegó a un punto crítico el sábado pasado cuando realmente (Lorna) fue por Sofiia, gritándole, usando un lenguaje duro que la dejó llorando. Dijo que no sentía que (Sofiia) pudiera quedarse más bajo nuestro techo y algo dentro de mí hizo clic”, relató.
“Le dije a Lorna: ‘Si ella se va, yo me voy’. Sabía que no podía renunciar a ella y, de repente, parecía una obviedad. Ambos empacamos nuestras maletas y nos mudamos juntos a la casa de mi mamá y mi papá”.
“Lo sentimos por el dolor que hemos causado, pero he descubierto una conexión con Sofiia como nunca antes”, pero “estamos planeando el resto de nuestra vida juntos (...) sabemos que esto es correcto”.
De esa forma una relación familiar de 10 años, terminó en un lapsus de 10 días.
“Ella está absolutamente devastada. Estuvo con Tony por 10 años y en un espacio de 10 días su familiar ha sido destrozada”, expresó un amigo de Lorna a The Sun.
Fuente: Metro