Cualquiera que haya asomado la cabeza en el mercado laboral sabe que el trabajo por horas se paga mejor, pero lo de Michael Jordan está en un nivel totalmente diferente.
El antiguo agente del deportista, David Falk, ha intervenido en un podcast en el que ha compartido algunas anécdotas sobre los acuerdos comerciales que ha aceptado Michael Jordan. Y sobre los que ha rechazado.
Aunque hace ya 18 años que Michael Jordan no juega de manera profesional, sigue siendo uno de los deportistas con más dinero del mundo debido a sus negocios. Jordan Brand, por supuesto, es una fuente de ingresos para él, así como la publicidad y sus empresas, entre las que destacamos el club Charlotte Hornets.
Hablando de este equipo, Falk explicaba: “Jordan rechazó un acuerdo para hacer una aparición de un día de golf cuando estaba en Asia hace cuatro años, para un juego de pretemporada con Charlotte. Y una mujer en Filipinas me ofreció 7 millones de dólares por un día, quería que jugara en un torneo de golf. Y él lo rechazó”.
Pero no terminan ahí las historias, sino que se escalan unos pocos millones más. “Le llevé un acuerdo hace tres años por 100 millones de dólares. Lo único que tenía que hacer, aparte de dar su nombre y su imagen, era hacer una aparición de dos horas para anunciar el acuerdo. Y lo rechazó”, asegura Falk.
El agente explica que para Michael Jordan el dinero nunca es el incentivo principal a la hora de participar en eventos y actividades. Con una economía saneada y con buenas perspectivas a largo plazo, el jugador se ve en la libertad de elegir dónde invierte su tiempo, incluso en perjuicio de (aún más) dinero.