MacKenzie Scott, ex esposa del CEO de Amazon, Jeff Bezos, ha informado de que donó más de 4.200 millones de dólares en los últimos cuatro meses a 384 organizaciones en los 50 estados de Estados Unidos, Puerto Rico y Washington DC, que abordan necesidades urgentes en medio de la pandemia de coronavirus, así como aquellas que combaten las desigualdades sociales arraigadas.
“Algunas organizaciones satisfacen necesidades básicas: bancos de alimentos, fondos de ayuda de emergencia y servicios de apoyo para los más vulnerables”, escribió Scott en su publicación de blog en Medium. “Otras están abordando las desigualdades sistémicas a largo plazo que se han agravado por la crisis: alivio de la deuda, capacitación laboral, crédito y servicios financieros para comunidades de escasos recursos, educación para personas históricamente marginadas y desatendidas, grupos de defensa de los derechos civiles y fondos de defensa legal que asumen la discriminación institucional”.
La donación de Scott no es algo nuevo. Ya aportó más de 1.700 millones a diversas organizaciones en julio, que incluían colegios y universidades históricamente afroamericanos.
Para acelerar sus donaciones en 2020, Scott recurrió a un equipo de asesores, utilizando datos para ayudar a identificar “organizaciones con sólidos equipos de liderazgo y resultados, con especial atención a aquellas que operan en comunidades que enfrentan una alta inseguridad alimentaria, alta desigualdad racial, elevadas tasas de pobreza y escaso acceso al capital filantrópico”, explicó.
Después de divorciarse de Bezos, Scott prometió en marzo de 2019 donar al menos la mitad de su fortuna a organizaciones benéficas como parte de su compromiso con el proyecto Giving Pledge, una iniciativa fundada en 2010 por los multimillonarios Bill y Melinda Gates y Warren Buffett que anima a las personas más ricas del mundo a donar la mayoría de su riqueza a causas benéficas.
Scott es la decimoctava persona más rica del mundo con un patrimonio neto estimado de casi 61.000 millones de dólares, según el índice de milmillonarios de Bloomberg. También es la tercera mujer más rica del planeta.
La fortuna de la escritora proviene de una participación del 4% en Amazon, que recibió como parte de su divorcio de Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo, en agosto de 2019, después de 25 años de matrimonio.
La participación de Scott en Amazon tenía un valor de alrededor de 36.000 millones de dólares en el momento de su divorcio. Pero ese valor se ha disparado este año por el repunte de las acciones de la compañía, ya que la pandemia hizo que los consumidores dependieran de las compras por internet.
Fuente: Yahoo.com