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El lamentable legado de Pablo Escobar en Colombia a 27 años de su muerte

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Colombia es considerada a nivel mundial como el mayor productor de cocaína -unas 1.100 toneladas métricas al año- y, aunque no existen los grandes carteles como en la década de los 80, sí son varias las redes que se financian del tráfico de drogas.

''El narcotráfico es la herencia maldita que dejó Pablo Escobar Gaviria tras 27 años de su muerte'', dice una nota publicada por el diario colombiano El Tiempo. 

Sobre la una de la tarde, del 2 de diciembre de 1993, Escobar fue abatido por un comando élite de la Policía. El día anterior había cumplido 44 años.

De Escobar o 'El Patrón' se decía que tenía una fortuna de entre 25.000 y 30.000 millones de dólares. Murió barbado, con el cabello largo y desaliñado, en el techo de una casa en la que llevaba varios meses evadiendo a las autoridades.

El entonces mayor de la Policía Hugo Escobar se adjudicó su muerte. "Viva Colombia", gritó el oficial al reportar la baja a sus superiores. Pero hasta la forma en que murió el capo se convirtió en leyenda y nacieron  varias versiones y teorías: que se suicidó,  que lo dieron de baja los "gringos" o que fue muerto por los paramilitares.

A Escobar,  jefe del 'Cartel de Medellín' se le sindican al menos 623 atentados, muchos de ellos con explosivos. Con los mismos intentó doblegar a todo un país. En medio de carros bomba y atentados perdieron la vida más de 400 civiles. 

Pablo

'El Patrón' marcó la historia del país por asesinar a más de 500 policías, a quienes les puso precio por su cabeza: dos millones de pesos colombianos por cada uniformado.

De Pablo Escobar se han escrito cinco libros, se han realizado dos novelas, una serie en Netflix y ha sido "coprotagonista" de varias series sobre narcotráfico en Colombia.

Se le sindica además del asesinato del entonces ministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla, en abril de 1984.  Del director de El Espectador, Guillermo Cano, en diciembre de 1986.  y de  Luis Carlos Galán, en agosto de 1989.

También perpetró varios secuestros como el de Andrés Pastrana, Francisco Santos, y el de Diana Turbay, hija del expresidente Julio César Turbay. Ella fue asesinada en medio de una operación de rescate.

A eso se suma que el 27 de noviembre de 1989, por órdenes de Escobar, fue activada una bomba en pleno vuelo, de un avión de la empresa Avianca, que cobró la vida 107 personas.

Y la llamada bomba del DAS, el 6 de diciembre de 1989. Ese día se activó un camión bomba cargado con 500 kilos de dinamita. Fueron asesinadas 63 personas, y más de 500 quedaron heridas.

Y aunque la violencia de este tipo, carros bombas y otro tipo de actos terroristas han disminuido en estos 27 años con la muerte de Escobar, siguen registrándose masacres, homicidios y todo hecho de barbarie a nombre del tráfico de cocaína.

El tesoro oculto de Pablo Escobar en Medellín | Noticias - Bozzina

Fuente: Diario El Tiempo