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El papel de la inteligencia artificial para ayudar a contener la pandemia de Covid-19

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Tomar decisiones basadas en conocimiento científico y asesorados por expertos en epidemiología y enfermedades infecciosas es clave para ayudar a controlar el avance de la pandemia.

Pablo Villoslada es médico neurólogo y profesor asociado de la Universidad de Stanford. Fundador y director científico de Accure Therapeutics y Attune Neurosciences opino sobre este tema en una nota al Diario La Vanguardia de España. 

¿Qué destacarías de la gestión que ha hecho de la crisis tu ciudad de residencia?

La respuesta a la pandemia en Silicon Valley ha tenido una perspectiva muy basada en la ciencia, a pesar del ruido de la política. La Universidad de California, en San Francisco, y la Universidad de Stanford han liderado estudios epidemiológicos, clínicos y genéticos que han permitido personalizar las medidas a tomar en base a los resultados en la población de California. Las compañías biotecnológicas se han volcado en desarrollar nuevos métodos diagnósticos y tratamientos, liderados por la aprobación del Remdesivir, de la farmacéutica Gilead. Las numerosas empresas de inteligencia artificial también han contribuido al análisis de datos biomédicos y desarrollado nuevas herramientas diagnósticas, por ejemplo, en colaboración con el Instituto de Stanford para la Inteligencia Artificial centrada en el ser humano. 

¿Cómo se ha visto la gestión de Barcelona desde tu ciudad?

Durante las últimas semanas se ha seguido en la prensa el aumento de contagios en toda Europa, observando con alarma los niveles en España y, en especial, en Madrid. Afortunadamente, Barcelona no ha sido mencionada frecuentemente por el rebrote, aunque poco a poco se van sumando más ciudades europeas a la lista de zonas en riesgo de rebrote. En lo que sí se han fijado los medios americanos es en el impacto de la pandemia en las cuentas del Futbol Club Barcelona, que han sido cifradas en más de 200 millones de euros. La imagen de Barcelona sigue siendo positiva pese a la pandemia y muchos americanos de la zona han visitado la ciudad en los últimos cinco años, en su mayoría aprovechando algún congreso médico o tecnológico, conservando un buen recuerdo.

Propuesta para Barcelona

Aunque no se puede trasladar directamente la experiencia de Silicon Valley a Barcelona por las diferencias en el estilo de vida, dispersión de la población y carácter individualista, algunas ideas sí pueden ser útiles. En todo momento ha habido trasvase de pacientes con Covid-19 de zonas con alta frecuencia como Los Ángeles a hospitales menos saturados como los de la Bahía de San Francisco. El teletrabajo, que ya tenía una elevada penetración, se ha generalizado y muchas universidades y empresas ya han comunicado a sus empleados que no vuelvan a las oficinas hasta el verano del 2021. La experiencia en California confirma que el tomar decisiones basadas en conocimiento científico y asesorados por expertos en epidemiología y enfermedades infecciosas es clave para ayudar a controlar el avance de la pandemia.

Fuente: Diario La Vanguardia