British American Tobacco (BAT), a través de su filial biotecnológica Kentucky BioProcessing (KBP) en Estado Unidos, está desarrollando una posible vacuna para el Covid-19, que ya está en fase de pruebas preclínicas.
Si esta fase tiene éxito la compañía espera poder fabricar entre uno y tres millones de dosis de la vacuna por semana a partir de junio. Aunque KBP continúa con sus operaciones comerciales, el propósito de la compañía es que su trabajo en torno a este proyecto se lleve a cabo "sin ánimo de lucro".
La vacuna utiliza la tecnología patentada de las hojas de tabaco de rápido crecimiento de BAT, un método "potencialmente más seguro", dado que las hojas de tabaco no pueden albergar patógenos que causen enfermedades humanas; y "más rápido", debido a que los elementos de la vacuna se acumulan en las plantas de tabaco rápidamente, 6 semanas, frente a los varios meses de los métodos convencionales.
"El desarrollo de la vacuna es un trabajo difícil y complejo, pero creemos que hemos logrado un avance significativo con nuestra plataforma tecnológica de la planta de tabaco, y estamos dispuestos a trabajar con los gobiernos y todas las partes interesadas para ayudar a ganar la guerra contra el Covid-19. Nos alineamos plenamente con el llamamiento de las Naciones Unidas a favor de un enfoque de toda la sociedad para combatir los problemas mundiales", ha dicho el director de Investigación Científica de BAT, David O'Reilly.
Asimismo, la formulación de la vacuna permanece estable a temperatura ambiente, a diferencia de las vacunas convencionales que, a menudo, requieren refrigeración, y tiene el potencial de proporcionar una respuesta inmunológica eficaz en una sola dosis.
En estos momentos, BAT está explorando la posibilidad de asociarse con agencias gubernamentales para llevar su vacuna a estudios clínicos lo antes posible. "Estamos comprometidos con la Agencia Americana del Medicamento y estamos buscando orientación sobre los próximos pasos. También nos hemos comprometido con el Departamento de Salud y Asistencia Social del Reino Unido, y con la Autoridad de Investigación y Desarrollo Avanzado Biomédico (BARDA) de Estados Unidos, para ofrecerles apoyo y acceso a nuestra investigación con el objetivo de tratar de acelerar el desarrollo de una vacuna para el Covid-19", ha zanjado O'Reilly.