La esposa de Kobe Bryant, Vanessa, está intentando terminar toda la burocracia referente a la trágica muerte de su marido y de la de su hija Gianna, además de otras siete personas más por un accidente en helicóptero.
Por eso, Vanessa está tratando de solventar todo lo referido al testamento del exjugador de Los Ángeles Lakers y su patrimonio estimado en unos 550 millones de dólares.
El representante de Kobe Bryant, Rob Pelinka, es junto a su mujer, Vanessa, los testaferros de la última voluntad del exbaloncestista de la NBA y ambos han presentado una solicitud formal en un juzgado angelino para modificar el testamento de Kobe Bryant y así poder incluir a la hija pequeña del matrimonio, Capri, que nació en junio de 2019 y no había sido incluida en la última moficación del mencionado testamento.
Kobe Bryant realizó su testamento en 2003 con el fin de que su mujer y sus descendientes estuvieran cubiertas ante un hipotético fatal desenlace, como así ha ocurrido. En este sentido, su hija Capri no está incluida en sus últimas voluntades. Tenía siete meses cuando su padre pereció.
En principio, el argumento con el que Vanessa Bryant y Rob Pelinka han dado al juez es que Kobe dejó muy claro que su intención era incluir a todas sus hijas en el testamento para que heredasen su patrimonio.