Buscar en Google:

Una doctora española desde Italia hace una advertencia desgarradora para todos e incluso jóvenes

Imagen

Esta enfermedad del coronavirus no es como una gripe, provoca neumonías muy graves, y no sólo se muere la gente mayor, paralelamente hay gente joven con necesidad de altas concentraciones de oxígeno.

La evolución de la epidemia en España deja cada día decenas de titulares y situaciones inéditas y este miércoles una de las novedades es que el número de positivos nuevos en sólo 24 horas ha superado los 2.500 casos, el incremento bruto más alto hasta la fecha, por encima del registrado el pasado lunes en Italia, el país europeo con más enfermos. 

El Ministerio de Sanidad ha comunicado este miércoles que la cifra de contagiados hasta las 12.00 horas es de 13.716 personas, lo que supone 2.538 casos positivos más que hace 24 horas. Aunque el bruto bata récord, el porcentaje de subida se queda en el 18%, ligeramente inferior al registrado la semana anterior.

El diario La Vanguardia de España presentó una nota con declaraciones de una doctora que hizo un llamado de atención, en especial a los jóvenes que no toman las precauciones necesarias. 

Una doctora catalana que ha dado positivo: “El virus no sólo mata a gente mayor”

Las cifras dejan sin aliento. Más de 16.000 contagios por coronavirus, casi 7.000 personas ingresadas, de ellas cerca de 1.000 en la UCI. 1.640 muertes. Estos desalentadores datos los conoce de primera mano la doctora Marta Ripoll (39 años). Son de la región de Lombardía.

Oriunda de un pueblecito del Urgell, esta catalana lleva ocho años viviendo en Milán. Las últimas semanas se las ha pasado en las urgencias de un hospital de la periferia de la capital lombarda, donde trabaja, luchando en primera línea contra el coronavirus. Al final, el Covid-19 ha conseguido infectarla, pero ni mucho menos derrotarla.

¿Cómo gestionó la noticia de saber que estaba contagiada por coronavirus?

Lo llevé bastante bien porque me lo esperaba. Sabía que había estado en contacto con gente que a posteriori dio positivo. Era sólo cuestión de tiempo. El hecho de que se me complicara con una neumonía lo he vivido con más angustia, porque viendo la evolución que hacen estas neumonías, que pueden llegar a ser muy graves, pues eso no te deja demasiado tranquila.

¿Qué es lo que lleva peor?

No poder trabajar con mis compañeros. No poder estar en primera línea es algo que llevo muy mal. Quien me conoce sabe que en 10 años he trabajado casi todos los días. Hacen falta manos, pero las mías ahora mismo no pueden estar ahí. Tengo que cuidarme. Pero si no puedo ayudar con mis manos, lo hago con mi cabeza. Sigo alertando a la población para que la situación se resuelva lo antes posible.

¿Cree que la situación en España puede llegar a parecerse a la de Italia?

Hace días que hablo con amigos, también con mis padres. Hablando con ellos me di cuenta de que en España, hasta hace bien poco, no se entendía la gravedad de la situación. Empecé a enviar información: imágenes de radiografías de pulmón, número de casos que teníamos en urgencias... todo ello para ponerles al corriente y alertarlos. Al final decidí colgar un post en Facebook porque no podía llegar a todo el mundo de manera individual. Mis padres y mis amigos están en España, y no quiero que vivan lo mismo que está ocurriendo en Italia.

¿Y qué consejos daría a la población española?

Que se quede en casa. Esta enfermedad no es como una gripe, provoca neumonías muy graves, y no sólo se muere la gente mayor, paralelamente hay gente joven intubada con necesidad de altas concentraciones de oxígeno. Que no dejen los niños con los abuelos, son la gente más frágil. No vayáis al parque, quedaros en casa, esta tiene que ser la norma para evitar el máximo de contagios. Cuantos menos contagios haya, menos personas enfermaran, y si menos personas enferman, mejor podrá resolver la situación el sistema sanitario.

Tiene toda la razón.

Por lo que estoy viendo, la curva española de casos está aumentando, casi más rápido que la italiana. Y sí, da miedo. Si no se empiezan a tomar medidas más serias, pronto España estará en la misma situación que Italia.

¿En qué situación están los hospitales italianos de las zonas más afectadas?

Están completamente colapsados, sobre todo los de la zonas más afectadas como Lodi, Cremona y Bérgamo. Ayer conocimos la noticia que en Bérgamo ya no hay más plazas en las UCI y que los pacientes tienen que ser desviados a otros centros. Y eso que Lombardía tiene uno de los sistemas sanitarios mayores de Europa: hay muchas plazas de UCI, muchas camas, pero se están empezando a agotar.

Entiendo.

Una de las principales preocupaciones es la falta de ventiladores mecánicos y de material para las UCI. Son materiales muy costosos. Lo cierto es que no estábamos preparados para atender a tanta gente que está siendo tratada con ventilación mecánica, y eso que ha habido muchas donaciones que ha propiciado la compra de nuevo material.

Llegan comentarios de personas que están en Italia, en primera línea, que explican que en Lombardía se está llevando a cabo un cribaje agresivo de los enfermos por el colapso de los hospitales. O sea, que si llega un paciente con coronavirus de 80 años no se le da prioridad...

Esta es una cuestión muy delicada y compleja. Con independencia de la situación actual, cuando llega un paciente a urgencias, antes de decidir que es una persona que se puede beneficiar de una terapia intensiva, pues nos lo planteamos mucho. Una persona con 80/85 años, con problemas previos de salud, difícilmente, incluso en otras situaciones, con otro tipo de neumonía, puede hacer una terapia intensiva de la cual obtener beneficio. Y no ahora por el Covid-19, sino siempre. En todos los lugares se hace así.

Le sigo.

Cuando un enfermo llega muy grave a urgencias, hacemos una valoración, junto con los colegas de reanimación, para decidir si esa persona puede obtener un beneficio o todo lo contrario. Hay que tener en cuenta que podemos llegar a dañar tratando a una persona en un momento dado, porque una intubación quiere decir un riesgo de infecciones muy alto, posibilidad de no extubación [procedimiento de retirar el tubo endotraqueal]. Es un mundo muy complejo.

Sin duda.

Es obvio que si tú tienes sólo un ventilador mecánico y te llega una persona de 60 años y otra de 85, el ventilador, seguramente, lo destinarás a la persona de 60, ya que posiblemente tendrá una perspectiva de vida mucho más larga. Pero, insisto, no creo que se algo que no se hiciera en otro momento distinto. Si en cualquier hospital llegan al mismo tiempo un adolescente de 17 años, víctima de un accidente de coche, y una persona de 85 años con una sépsis generalizada, el ventilador irá para el chico.

Tiene que ser muy duro...

Los parientes no los pueden visitar, cuando están en urgencias tampoco pueden entrar, y eso causa mucha soledad. Para ellos, pero también para nosotros. No sabemos cómo consolarlos. Tú estás con tu equipo de protección, ellos prácticamente sólo te ven los ojos... es muy difícil.

Me imagino.

A veces tenemos tiempo de avisar a los parientes. Les dejamos entrar con las protecciones adecuadas para que se puedan despedir. Pero a veces el enfermo empeora súbitamente y no hay tiempo. Es una situación dura.

¿Cuántas horas seguidas podía llegar a trabajar en el hospital para hacer frente a la epidemia?

En estos días no hemos hecho descansos. Trabajamos cada día en turnos de 8 a 12 horas.

¿Son suficientes médicos?

Empiezan a faltar profesionales porque muchos están en cuarentena o hemos enfermado. Y esta realidad, cuando hay una situación de incremento de trabajo, se nota. Por suerte, compañeros de otras especialidades (cirujanos, cardiólogos...)han venido a urgencias a echar una mano.

¿Había vivido una situación similar a esta alguna vez?

Nadie de nosotros había vivido una pandemia tan grave y dura. Y sobre todo con tantos casos concentrados en una cierta zona en tan poco tiempo. Ese es el principal problema, tener tantos casos de una misma patología concentrados en tan poco tiempo. Eso es lo que hace que el sistema sanitario colapse. No es tanto la enfermedad en sí misma. A ver, no es una gripe, es un virus muy virulento, que causa neumonías muy graves. Pero si los casos se hubieran producido en un espacio de dos, tres, cuatro o cinco meses, pues es una cosa, pero todo el mundo se contagia al mismo tiempo, en 15 días o tres semanas... El sistema sanitario no está preparado para aguantar esta situación, con lo que te encuentras con dificultades.

¿Qué le ha impactado más?

La facilidad del contagio. El virus se contagia muy fácilmente. Hablando, tosiendo, con un apretón de manos, un abrazo, un beso, tocando una superficie que ha estado en contacto con el virus... Y también su virulencia. No había visto nunca casos de neumonías tan graves. Recuerda mucho al SARS, también al MERS, pero enfrentarte a tantos casos a la vez como ahora es impresionante.

Tiene que ser desalentador.

Otra cosa que me ha impactado es la transformación de los hospitales para poder afrontar, de un día para otro, esta crisis. Todo el esfuerzo que supone, creando plazas de UCI en salas operatorias, compañeros trabajando muchas horas con las máscaras que acaban con dificultad para respirar y dolor de cabeza... Nadie se ha echado para atrás. Todo lo contrario, los profesionales estamos unidos más que nunca, con la máxima colaboración.

¿Ve próximo el final de esta pesadilla?

No. La zona roja en Italia empezó el lunes 9 de marzo, o sea que se espera que en los próximos 15 días los casos sigan aumentando. Hay que pensar que la incubación va de los dos a los 14 días, algunos casos incluso hasta los 20/21. Se supone que la gente que se ha contagiado hace una semana todavía tiene que desarrollar los síntomas, por lo que todavía está por venir una oleada importante de casos.

¿Cómo se encuentra usted?

Bastante bien ahora mismo. Un poco cansada, con algo de tos. Al principio parecía como si estuviera incubando una gripe, sin fiebre demasiado alta. De hecho, hasta el día antes de saber que tenía una neumonía, había tenido solo febrícula. Por suerte, sólo he estado tres días ingresada. Ni tan sólo he necesitado que me trataran con la terapia antiviral porque, por suerte, mi cuerpo ha respondido bien, con lo que sólo me han tenido en observación para que no tuviera dificultades para respirar.

¿Cómo han reaccionado los italianos a esta pandemia?

La gente al principio no se la tomaba en serio, parecido a lo que puede pasar en España ahora. Continuaba saliendo a la calle, haciendo vida normal. Pero a medida que los casos han ido aumentando, se han ido asustando. Han empezado a concienciarse de que si no colaboran y permanecen en casa, lo contagios no disminuirán, con lo que será un desastre. Todo el mundo empieza a tener parientes, amigos, que tienen el virus, que están ingresados o incluso que han muerto. Y es que 1.640 muertos en 26 días en una sola región pone los pelos de punta. Por eso nos tenemos que quedar en casa.

¿Cree que trabajan con los medios de protección adecuados para garantizar su seguridad?

Por suerte, sí. Al principio, nadie se esperaba que pudiera ocurrir algo así.

Fuente: Diario La Vanguardia