Gracias a la tecnología se han podido tomar imágenes de diversos cuerpos en el espacio como estrellas, planetas y hasta agujeros negros, los cuales aún son un gran misterio para los científicos.
Fue en 2017 cuando un grupo de astrónomos que operaban el Telescopio Event Horizon reprodujeron la primera imagen de estos objetos, los cuales se caracterizan por ser densos, compactos y tener una atracción gravitacional tan fuerte que nada puede escapar una vez entrando en él, incluyendo la luz.
Todo ocurrió en el centro de la galaxia Messier 87, la cual se ubica a 55 millones de años luz de la Tierra y cuenta con una oscuridad de 40 mil millones de kilómetros de diámetro, allí se descubrió que al agujero tenía una forma similar a la de una rosquilla con un aro asimétrico alrededor.
Tiempo después el mismo equipo de científicos hizo una segunda toma del agujero negro y lo curioso es que tenía detalles más asombrosos.
La evidencia resaltó que el aro que rodeaba el objeto era considerablemente más grueso y brilloso del lado derecho. Además, el centro del objeto se había movido a la parte superior izquierda, pero esto al parecer tendría una explicación.
El científico Dominic Chang, quien trabaja en el equipo de Event Horizon comentó que "La primera imagen de un agujero negro se parecía mucho a las predicciones matemáticas que casi parecía una casualidad", refiríendose a la teoría de la relatividad de Einstein.
¿De qué se trata la teoría de la relatividad de Albert Einstein?
Esta fue planteada en 1915 y describe cómo se comportan los cuerpos en campos gravitacionales de cualquier tipo, pequeños o grandes. Sus predicciones incluyen la deflexión de la luz en la presencia de masas, así como el cambio de ritmo del tiempo debido a los campos gravitacionales.
"Si bien la relatividad general dice que el tamaño del anillo debería permanecer bastante fijo, la emisión del turbulento y desordenado disco de acreción alrededor del agujero negro hará que la parte más brillante del anillo se tambalee alrededor de un centro común. La cantidad de oscilación que vemos a lo largo del tiempo es algo que podemos utilizar para probar nuestras teorías sobre el campo magnético y el entorno de plasma alrededor del agujero negro", dijo Britt Jeter, una de las involucradas en el proyecto.
De acuerdo al portal 'The New York Times', Einstein consideraba a los agujeros negros eran una de las muchas predicciones problemáticas que se desprendían de la relatividad general como por ejemplo atribuir a la gravedad a deformaciones de la geometría del espacio-tiempo o que si se concentraba demasiada materia dentro de un cierto radio colapsaría para siempre en un agujero en el espacio-tiempo del que ni siquiera la luz podría escapar.
"Una de las propiedades notables de un agujero negro es que su radio depende en gran medida de una sola cantidad: su masa. Dado que no está acumulando material a un ritmo rápido, la relatividad general nos dice que su radio permanecerá prácticamente sin cambios a lo largo de la historia de la humanidad. Es muy emocionante ver que nuestros datos confirman esta predicción".
Esto dejó como conclusión que a pesar de la poca información que se tenía en los años 1900 sobre el universo Einstein habría hecho planteamientos muy acertados que hoy tendrían validez científica.
Fuente: The New York Times - Univisión