Investigadores japoneses han descubierto que la enfermedad periodontal y la pérdida de piezas dentales están vinculadas con la disminución del tamaño del hipocampo, región cerebral que interviene en la memoria y que suele encontrarse dañada en pacientes con alzhéimer.
En su informe mundial de 2022 sobre el estado de la salud bucodental, la Organización Mundial de la Salud estimó que las enfermedades bucodentales afectan a cerca de 3,500 millones de personas en todo el mundo. Entre tanto, más de 55 millones de personas viven con demencia en todo el planeta.
¿A QUÉ SE DEBE QUE LA SALUD BUCAL PUEDA AFECTAR EL CEREBRO?
“Otros estudios han demostrado que la inflamación periférica crónica puede elevar el riesgo de demencia y propiciar la atrofia del hipocampo, trastorno comúnmente conocido como encogimiento del cerebro”, dice a Newsweek el Dr. Satoshi Yamaguchi, profesor asistente de la Escuela de Odontología de la Universidad de Tohoku, Japón, y autor principal del estudio, publicado el pasado 5 de julio en la revista Neurology.
“La enfermedad periodontal [periodontitis o enfermedad de las encías] es una inflamación crónica de la cavidad bucal que puede afectar el hipocampo”, prosigue el científico. “Más aún, algunos investigadores sugieren que los [microbios que causan periodontitis] pueden introducirse en el cerebro y dañar el tejido nervioso”.
En cuanto a la pérdida de piezas dentales y falta de salud bucal, Yamaguchi explicó que los dientes faltantes reducen la estimulación que provoca la masticación, y se ha demostrado que esta complicación contribuye al encogimiento del cerebro.
Con todo, Yamaguchi aclara que su estudio, por sí solo, no comprueba que exista una relación causal entre la enfermedad de las encías y el encogimiento del cerebro.
“[Nuestra investigación] solo demostró que la cantidad de dientes y la enfermedad periodontal se correlacionan con la tasa de atrofia del hipocampo”, puntualiza.
“También es importante tomar en cuenta que la edad puede confundir la asociación entre una menor dentición y una mayor tasa de atrofia del hipocampo, ya que es común que la cantidad de dientes disminuya con el paso de los años”, señala el autor de la investigación.
BUENA HIGIENE BUCAL, ANTE TODO
El estudio de la revista Neurology se basa, exclusivamente, en los datos obtenidos de los individuos mayores de 55 años que formaban parte de una reducida población de 172 participantes.
“Necesitamos estudiar una población más numerosa y diversa para verificar la generalización de nuestros hallazgos”, agrega el investigador japonés. “Por ello, hacen falta estudios de intervención que confirmen la relación causal y esclarezcan el mecanismo” subyacente a la asociación.
A pesar de esas limitaciones, el estudio de Yamaguchi y su equipo proporciona evidencias convincentes de que una buena higiene bucal podría protegernos de futuras enfermedades cerebrales. “En vez de conservar toda la dentadura a cualquier costo, considero más conveniente extraer los dientes con enfermedad periodontal grave y difícil de tratar, y reemplazarlos con prótesis dentales adecuadas”, opina el especialista.
Yamaguchi confirma que la enfermedad periodontal es un “padecimiento silencioso” que puede evolucionar a estados graves sin ocasionar dolor. “Si a esto sumamos el problema de que no existen criterios bien definidos para la extracción dental en casos de enfermedad periodontal, es importante acudir regularmente a un dentista de confianza”, concluye.