Bobi, un perro portugués que fue declarado el perro más viejo del mundo por Guinness World Records en febrero, celebró recientemente su cumpleaños 31 el jueves.
Así lo confirmó Guinness en un comunicado de prensa.
La familia de Bobi planeó una fiesta de cumpleaños en su casa en Conqueiros, un pueblo rural en el sur de Portugal.
Su dueño, Leonel Costa, dijo a Guinness que será una fiesta portuguesa “muy tradicional”. Según el comunicado de prensa, asistirán más de 100 personas y se presentará un grupo de baile.
Costa le dijo a Guinness que Bobi ha recibido mucha atención desde que fue coronado como el perro más viejo del mundo.
“Tuvimos muchos periodistas y personas de todo el mundo que vinieron a tomarse una foto con Bobi”, indicó en el comunicado.
Agregó que el perro gozaba de buena salud y recientemente recibió un chequeo debido a las preocupaciones de Costa sobre el estrés de los visitantes frecuentes.
“Se tomaron muchas fotos y tuvo que subir y bajar muchas veces”, dijo en el comunicado. “No fue fácil para él”.
Bobi es un Rafeiro do Alentejo de pura raza, una raza de perro portugués entrenado para cuidar el ganado, según su dueño. A medida que envejecía, tenía dificultades para caminar y también experimentó una disminución de la vista.
Costa atribuyó la longevidad de su perro en parte al “ambiente tranquilo y pacífico” donde vive.
Además de ser el perro más viejo que vive actualmente, Bobi también es el perro más viejo jamás registrado, según Guinness. Costa tenía solo 8 años cuando nació su compañero canino.
“Bobi es especial porque mirarlo es como recordar a las personas que fueron parte de nuestra familia y lamentablemente ya no están, como mi padre, mi hermano o mis abuelos que ya se fueron de este mundo”, dijo en el comunicado.