Austria planea pasar de su actual toque de queda nocturno y cierre parcial a un confinamiento total desde el martes hasta el domingo 6 de diciembre.
El Gobierno austriaco ha usado hasta ahora un enfoque más suave para tratar la segunda ola de casos de coronavirus que en la primera. Este mes hay un toque de queda nocturno de 8 p.m. a 6 a.m. pero las tiendas están abiertas; los cafés, bares y restaurantes están limitados al servicio de comida para llevar; los teatros y museos están cerrados.
Esas medidas no han logrado impedir que los contagios se aceleren. Los nuevos casos diarios alcanzaron un récord de 9.586 el viernes, nueve veces más que en el pico de la primera ola.
Un resumen y borrador de un decreto gubernamental obtenido por Reuters mostró que el país cambiaría a un confinamiento completo a partir del martes, con el público obligado a permanecer en casa todo el día con sólo algunas excepciones como ir a la compra o hacer ejercicio.
Las tiendas no esenciales cerrarán, así como los proveedores de servicios como las peluquerías. Las escuelas de enseñanza secundaria ya se han cambiado a la educación a distancia, pero las escuelas para edades más tempranas que todavía están abiertas harán lo mismo mientras que proporcionarán cuidado de niños cuando sea necesario. La gente debe trabajar desde casa siempre que sea posible, si el empleador y el empleado pueden acordar las condiciones, dice el proyecto.