La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) hizo un llamado a considerar el alivio del pago de intereses de la deuda a países de Centroamérica, al menos hasta 2021, debido a las condiciones económicas que enfrentan por la crisis derivada de la pandemia del coronavirus.
De acuerdo con la Cepal, la secretaria ejecutiva del organismo, Alicia Bárcena, señaló que, en el ámbito macroeconómico, los países de Centroamérica y República Dominicana han puesto en marcha diversas políticas fiscales y monetarias, acciones e incentivos que, en promedio, equivalen a 5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
“Sin embargo, estos países enfrentan un reducido espacio fiscal y un pago del servicio de la deuda que excede por mucho lo que pueden invertir en salud, por ejemplo. Por eso hago un llamado urgente a que la comunidad internacional considere el alivio del pago de intereses de la deuda de los países de Centroamérica, que asciende a 2.7 por ciento del PIB, por lo menos hasta 2021”, indicó.
Durante su participación en un evento de alto nivel titulado “El Pacto Global sobre los Refugiados y el Desplazamiento forzado en Centroamérica: Cooperación regional y el MIRPS como solución”, organizado por los Gobiernos de España y El Salvador en el marco de la 75º Asamblea General de las Naciones Unidas, Bárcena dijo que los países de la subregión requieren apoyo urgente de la comunidad internacional, pese a ser considerados de renta media.
Añadió que, en el caso de Centroamérica y República Dominicana, la Cepal estima que el PIB caerá 5.7 por ciento, cinco de los ocho países de la subregión alcanzarán tasas de pobreza superiores a 40 por ciento y solo Panamá, Costa Rica y República Dominicana registrarán tasas en torno a 20 por ciento.
Plan de Desarrollo Integral
En ese foro, la secretaria ejecutiva de la Cepal también presentó el Plan de Desarrollo integral (PDI) para el norte de Centroamérica y México, que considera es la llave para atender las causas estructurales de la migración, porque busca crear un espacio de desarrollo sostenible estimulando el crecimiento económico, promoviendo el acceso universal a los derechos sociales, impulsando la resiliencia al cambio climático y garantizando los derechos durante todo el ciclo migratorio.
Detalló que el Plan de Desarrollo Integral, que involucra a 20 agencias, fondos y programas de las Naciones Unidas que operan en América Latina y el Caribe, busca cambiar la narrativa de la migración, ubicando la dignidad de la persona migrante y los derechos humanos en el centro con un enfoque de seguridad humana y adoptando un enfoque de ciclo migratorio: origen, tránsito, destino y retorno.
Agregó que el plan explora sinergias regionales y abordajes desde la integración, releva y amplía lo que los Estados ya hacen bien con sus recursos y fortalece capacidades públicas.
La propuesta está ordenada en cuatro ejes temáticos: desarrollo económico, bienestar social, sostenibilidad ambiental y gestión integral del ciclo migratorio, y contempla 22 programas y 114 proyectos listos para poner en marcha, que involucran una inversión de 45 mil millones de dólares en 5 años.
En este contexto, Alicia Bárcena instó a España y Canadá a concretar una reunión internacional, encabezada por el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, que permita dar a conocer el Plan de Desarrollo Integral y atraiga inversiones y cooperación internacional a la subregión.
También destacó la iniciativa que el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, propuso ante la ONU para crear un Fondo contra la Economía del Covid-19 (Iniciativa FACE por sus siglas en inglés), que consiste en un fondo de apoyo extraordinario de 500 mil millones de dólares, financiado con el 0.7 por ciento del PIB de las economías más grandes y fuertes del mundo, —aquellas que representan 80 por ciento del PIB mundial—, para ser intermediados por uno o varios bancos multilaterales de desarrollo, como préstamos concesionales a los países en desarrollo.