
No es ninguna sorpresa que el mar es una de las grandes pasiones de Nadal, de hecho, siempre ha declarado que le resulta indispensable para relajarse, desconectar y ser feliz, de ahí que no haya extrañado este nuevo capricho. No hay que olvidar que anteriormente poseía otro yate, Beethoven, con el que surcó durante 3 veranos el Mediterráneo y que ha venido por 2,6 millones de euros.



