En 2006, Nadia y Bart dieron la bienvenida a su hijo, Dylan, al mundo. Nadia lo considera el centro de su vida. El hombrecito siempre pasa tiempo con su mamá y su papá. A ambos les encanta mostrar fotos de él a todos. Y aunque Dylan todavía es muy joven, todos quieren saber si él también terminará teniendo una carrera como atleta.
Pero incluso si elige un camino de vida muy diferente al de sus padres, seguirá recibiendo todo el amor y el apoyo que puedan brindarle.