Dietmar Hopp, principal inversor del Hoffenheim y repudiado por las aficiones más importantes de la Bundesliga, financia la empresa CureVac, que trabaja en una posible vacuna contra el COVID-19.
Antes de que el brote de coronavirus obligara a suspender las principales ligas de Europa, que ahora se convirtió en el epicentro de la pandemia, Dietmar Hopp había generado un gran revuelo.
El multimillonario y principal inversor del Hoffenheim fue insultado por los ultras de varias aficiones de la Bundesliga, entre ellas las del Bayern Munich y el Borussia Dortmund, por querer cambiar la regla "50+1", que en ese país regula las licencias de los clubes profesionales para que más del 50% sea de los socios. Sin embargo, de ser "el más odiado" del fútbol alemán podría pasar a ser un héroe mundial porque la empresa que financia Hopp trabaja en una posible vacuna contra el COVID-19. Es más, Donald Trump está muy interesado en comprarla...
La empresa bio farmacéutica CureVac, con sede en la ciudad de Tubinga (sur de Alemania), se especializa en la investigación y el desarrollo de medicamentos y vacunas innovadoras.
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En este momento, en conjunto con el instituto Paul Ehrlich de vacunas y biomedicina, están trabajando para crear una posible vacuna contra el coronavirus. Desde 2006 y hasta 2014, CureVac fue financiada de manera exclusiva por Hopp, quien además es uno de los fundadores y el propietario de la empresa alemana de productos informáticos SAP (la mayor compañía de software de Europa y la tercera más grande del mundo).
Mientras se trabaja a contrarreloj en cada uno de los laboratorios, Donald Trump quiere quedarse con los derechos exclusivos de esta potencial vacuna para llevársela a Estados Unidos. Según informó el diario alemán Welt am Sonntag, el presidente ofreció "altas subvenciones financieras", aunque la respuesta fue negativa.
"Queremos desarrollar una vacuna para proteger y ayudar a pacientes de todo el mundo y no para países individuales. Rechazamos las alegaciones de ofertas de adquisición de la compañía o su tecnología y no haremos declaraciones sobre esta indirecta, pero manifiesta, disputa comercial. Tenemos mucha confianza en que podremos desarrollar una vacuna potente en los próximos meses", aseguró la compañía en un comunicado.
De todas maneras, ante la insistencia del presidente de Estados Unidos, el Gobierno alemán está negociando con CureVac y con Hopp para evitar que Trump consiga los derechos exclusivos de la potencial vacuna.
El objetivo es que la misma se desarrolle en ese país y en Europa, y que los ensayos clínicos comiencen a principios del verano europeo. Según informa la propia compañía, hasta diciembre de 2019, "CureVac recibió aproximadamente 400 millones de euros en inversiones de capital, incluidas importantes inversiones del fundador de SAP, Dietmar Hopp, y la Fundación Bill y Melinda Gates".
Fuente: Diario El Clarín Argentina