El deporte no es ajeno a la epidemia de coronavirus que ataca a China y el Gran Premio de Fórmula 1 que se disputará en el Circuito Internacional de Shanghái, previsto inicialmente el 19 de abril, será aplazado a una fecha que aún no fue precisada, según anunció este miércoles la Federación Internacional del Automóvil (FIA).
La “propagación continua” del coronavirus, bautizado oficialmente como COVID-19, ha obligado a la entidad que regula el automovilismo a nivel mundial a suspender el evento que forma parte del calendario oficial de la categoría reina desde 2004. La FIA explicó que los promotores de la carrera habían solicitado un aplazamiento por el avance de este virus que ya provocó el fallecimiento de 1.100 personas en China.
“La salud y la seguridad de los equipos, de los participantes en el campeonato del mundo y de los aficionados siguen siendo la principal preocupación”, comunicaron desde la F1.
La totalidad de las muertes por coronavirus en China se han producido en la provincia de Hubei, corazón de la epidemia, cuya capital es Wuhan. El Gran Premio iba a tener lugar en Shanghái, a más de 800 kilómetros al este del epicentro. Sin embargo, fuera de China, incluidas las regiones autónomas de Macao y Hong Kong, se han confirmado cerca de 500 casos de contagio en más de 30 países.
Este aplazamiento de la cuarta fecha del calendario 2020 también pone en riesgo la disputa de la jornada anterior, que iba a disputarse dos semanas antes en Vietnam, país que va a hacer su debut en el Mundial de Fórmula 1 pero donde también ha habido casos de COVID-19.
Aunque la carrera de Vietnam no sea aplazada, la suspensión del evento en China implica que por el momento el campeonato tendrá 21 carreras y habrá un periodo de cerca de un mes sin carreras de Fórmula 1, ya que la próxima será la de Holanda, el 3 de mayo.
Resultará muy difícil poder encontrarle un nuevo lugar a la carrera china en el calendario ya que solamente hay tres fines de semana libres en el último tercio de la temporada y, como si fuera poco, Abu Dhabi debe ser por contrato la última carrera del Mundial de Fórmula 1. La última vez que se había suspendido un evento de la categoría reina de automovilismo fue el de Bahréin 2011, cancelado por la crisis social de la región.