Hecho del mismo material que los sueños y, cuando todo hacia pensar que Espartaco era invencible, desgraciadamente ha perdido la batalla contra su peor enemigo, el tiempo.
Kirk Douglas, la última gran leyenda masculina del Hollywood dorado ha fallecido a los 103 años. Un récord de longevidad superado solo por siete meses por Olivia de Havilland, la única superviviente de lo que el viento aún no se ha llevado.Tres de sus hijos, Michael, Joel y Eric, lo anunciaban a través de un comunicado. Michael, el más mediático, acabó con la misma frase que dijo en el último cumpleaños de su padre: "Papá, te quiero mucho y estoy muy orgulloso de ser tu hijo". Para la posteridad quedan trabajos memorables e imperecederos: Carta a tres esposas (1949), El loco del pelo rojo (1956) o Espartaco (1960). Nominado en tres ocasiones al Oscar, solo consiguió el honorífico en 1996 por su trayectoria profesional. Años más tarde, su aparición en el escenario de los premios de la Academia se granjeó los aplausos y las risas del auditorio cuando besó en los labios a la jovencísima Anne Hathaway.
El actor, con Diana, su primera esposa y madre de Michael y Joel.
A diferencia de algunos de sus colegas como Elizabeth Taylor, Zsa Zsa Gabor o Lana Turner, que se casaron en incontables ocasiones, Kirk lo hizo en dos ocasiones. La primera con la actriz Diana Dill (1943-1951) con quien tuvo dos hijos, Michael y Joel. La segunda fue con Anne Buydens, con quien tuvo otros dos hijos, Peter y Eric, éste último fallecido a causa de las drogas en 2004. Su viuda tiene en la actualidad 100 años.A pesar de haberles jurado fidelidad a sus esposas, pocas mujeres se le resistieron. De hecho, sus conquistas con legendarias actrices de Hollywood eran bien conocidas entre el mundillo, pero él no las confesó hasta que publicó su autobiografía Let's Face It: 90 Years of Living, Loving, and Learning. Entre sus amantes se encontraba la diosa pelirroja de origen español Rita Hayworth; Patricia Neal, que previamente había abortado el hijo que esperaba de Gary Cooper mientras también se veía con Douglas; la andrógina Marlene Dietrich; la celestial Gene Tierney o la sempiterna vampiresa Joan Crawford. Pero también le dieron calabazas, como Lauren Bacall, que con su voz metálica y sus ademanes elegantes le dijo que no en repetidas ocasiones.
Foto: Con su segunda y última esposa, Anne Buydens.
De la Hayworth llegó a confesar que "sentí algo profundo en ella que no pude evitar: soledad, tristeza, algo que me derribaría. Tuve que alejarme de ella"; de la Tierney adoraba lo traviesa que era cuando le pedía que entrara y saltara por la ventana de su casa: "lo mío no era cuestionar por qué, sino solo atravesar esa ventana" y aunque parezca mentira, se arrepintió de su único encuentro carnal con la Crawford: "La boca le olía mal y cuando fuimos a su casa me quedé sorprendido de que se abalanzara sobre mí. Posteriormente me hizo un tour por su casa que no me pareció nada interesante y me fui".Una de las leyendas que persiguió siempre al actor de origen ruso judío fue su relación con Ava Gardner. Entre risas, dijo que "lo más lejos que fui con ella fue aconsejarla durante su tumultuoso matrimonio con Frank Sinatra".
Foto: Con Patricia Neal, quien mantuvo un romance al mismo tiempo con Gary Cooper.
A pesar de haber aguantado las infidelidades y de haberlas hecho públicas, Kirk y Anne celebraron el año pasado sus bodas de platino.