Este lunes se decide el Grupo B del Mundial. La selección de Portugal se enfrentará a Irán, que todavía tiene opciones de clasificarse para octavos. Los iraníes saben que para doblegar al conjunto luso necesitarán que Cristiano Ronaldo no tenga el día y por este motivo sus aficionados se han pasado la noche haciendo ruido delante del hotel de concentración de la selección portuguesa.
Durante la madrugada del domingo, varios centenares de aficionados del combinado del país asiático se concentraron a las puertas del hotel Mercure dispuestos a no dejar dormir a los jugadores de Fernando Santos, los vigentes campeones de Europa.
Vuvuzelas, tambores, palmas y cánticos, son los instrumentos que han utilizado los seguidores de Irán para no dejar dormir a los jugadores portugueses. Y parece que han logrado su objetivo, pues el mismísimo Cristiano Ronaldo se ha asomado al balcón de su habitación en mitad de la noche para pedir silencio y pedir con un gesto que quería dormir.