2008: Europass
La España de Luis Aragonés triunfó en una edición que decidió cambiar la estructura original del balón para dejar atrás los 32 paneles y tener solo 14. Además, añadió una textura algo rugosa en su superficie para ayudar a los porteros y facilitar los controles en cuanto a agarre. Nada que ver con el Roteiro, tampoco con los originales. Blanco y negro, pero con tonos rojos. Muy característico. En la final que disputaron Alemania y España se utilizó uno especial, una versión plateada.