El Hibernian supera al Rangers y gana la Copa de Escocia 114 años después

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Publicado: Sábado, 21 Mayo 2016 15:12

Escrito por Redacción

El equipo verde de Edimburgo está de enhorabuena: acaba de conquistar la Copa escocesa por tercera vez en su historia. Para encontrar el anterior trofeo en su palmarés hay que remontarse a 1902.

Los bisabuelos de David Gray probablemente no habían nacido la última vez que el Hibernian ganó por última vez la Copa de Escocia. El cabezazo del defensa central, capitán del equipo, en el tiempo añadido sirvió para firmar el 3-2 definitivo en la final contra el Glasgow Rangers (ese gigante venido a menos que poco a poco va recuperando su sitio) y poner fin a una sequía que duraba ni más ni menos que 114 años.

El Hibernian, club creado para representar a la población católica y de ascendencia irlandesa de Edimburgo, es uno de los equipos históricos de su país. Fundado en 1875, desde sus orígenes ha utilizado los colores verde y blanco asociados históricamente a la isla vecina. De hecho, su propio nombre alude a "Hibernia", el nombre en latín para ese mismo territorio. Al estar en la capital, siempre ha contado con una gran base de seguidores.

Sin embargo, se ha mantenido en una discreta segunda fila, como todos los demás en un país dominado con mano de hierro por los colosos de Glasgow. En su palmarés apenas hay cuatro títulos de Liga (el último en 1951), tres Copas de la Liga y, con la de hoy, tres Copas de Escocia, pese a que en el norte de Gran Bretaña se lleva jugando al fútbol de forma organizada desde 1890.

De hecho, la victoria actual tiene más mérito si se tiene en cuenta que el Hibernian disputa el Championship, segunda división del fútbol local. Curiosamente, el Rangers, su oponente en la final, también ha jugado esta campaña en la categoría de plata, siendo la primera vez en la historia del torneo (que lleva ya 131 ediciones) en que ninguno de los dos finalistas está en el nivel máximo.

A los de Edimburgo estuvo a punto de aguarles la fiesta la actitud de sus hinchas, poco habituados a este tipo de celebraciones. Nada más indicar el árbitro que el partido había terminado, miles de personas invadieron el césped ondeando bufandas y banderas verdes y provocando alguna escaramuza con la afición de su rival. La policía hubo de desalojarles a caballo, amagando con utilizar métodos violentos.

El presidente del club, Rod Petrie, se mostró "decepcionado y avergonzado" por los incidentes y alabó la forma que tuvieron las autoridades de resolver la el conflicto, que estuvo a punto de provocar una batalla campal cuando los aficionados hibs se enzarzaron con algunos ultras del equipo protestante de Glasgow. Por suerte tras algunos minutos la situación se tranquilizó y la ceremonia de entrega del premio pudo concluir con normalidad, sin más daños que una portería destrozada y trozos de césped arrancados. Eso sí, los jugadores del Rangers denunciaron amenazas y coacciones; de hecho, no pudieron asistir a la entrega de medallas porque temían por su seguridad. La policía y la federación escocesa de fútbol han comenzado una investigación sobre lo sucedido.

Fuente: yahoo.com