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AL PIE DEL DEPORTE CON EVERARDO HERRERA SOTO 6 PM DEL 23/4/2024

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FIFA demanda a ex dirigentes por casi $28 millones y a Eduardo Li por más de $10 mil

La FIFA acusa a Sudáfrica de pagar para obtener Mundial 2010 y Jack Wagner de los mayores involucrados

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Los dirigentes involucrados en el escándalo en el escándalo FIFA de CONMEBOL y CONCACAF  fueron demandados por ese organismo para devolver dineros por salarios,premios o compensaciones por actos en que incurrieron por cerca de $28 millones . En la lista aparece el guatemalteco Rafael Salguero al que le cobran más de $5 millones y al ex presidente de la Fedefútbol, Eduardo Li $10,750.

La demanda de la FIFA en la justicia federal de Nueva York para recuperar más millones de dólares desviados en sobornos significa un nuevo golpe para los exdirigentes de la Concacaf y Conmebol procesados en la causa de corrupción, a quienes se les exige ahora incluso devolver sus salarios y otros beneficios.

En su demanda de 22 páginas dada a conocer este miércoles, la FIFA cifra en "por lo menos 24.224.687 dólares" el dinero cuya restitución exige en concepto de salarios y otros beneficios obtenidos por los acusados por sus cargos dentro de la organización desde 2004.

"Al privar a la FIFA de servicios honestos, los acusados obtuvieron dinero de la FIFA de manera injusta en forma de salarios, bonos, beneficios y otras compensaciones", afirma la denuncia, precisando que la organización "tiene derecho a la restitución de esos montos".

La lista incluye uno por uno a casi todos los exdirigentes de la Concacaf y la Conmebol procesados ante la justicia federal de Nueva York y que integraron en algún momento el Comité Ejecutivo de la FIFA u otros cargos en la organización.

A Ricardo Teixeira, expresidente de la Confederación Brasileña de Fútbol y exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, se le exigen más de 3,5 millones de dólares.

Para el paraguayo Nicolás Leoz, también exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y expresidente de la Conmebol, el monto demandado en este apartado asciende a más de 3,25 millones USD.

A Rafael Salguero, otro exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y expresidente de la Federación Nacional de Fútbol de Guatemala, se le reclaman más de 5,13 millones de dólares.

Para Eugenio Figueredo, exvicepresidente y exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, expresidente de la Conmebol y de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), el reclamo es de más de 1,01 millones USD.

En el caso del brasileño Marco Polo del Nero, expresidente de la CBF y exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, la suma demandada asciende a más de 1,67 millones USD.

Al colombiano Luis Bedoya, exvicepresidente de la Conmebol y exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA que ya se declaró culpable, se le exigen 517.843 dólares.

Casos de Concacaf y Uncaf

Los montos son menores aunque el algunos casos no desdeñables para otros exdirigentes de la región, como el hondureño Alfredo Hawit (230.479 dólares), el paraguayo Juan Ángel Napout (339.693 USD), el nicaragüense Julio Rocha (387.781 USD) y el brasileño José María Marín (114.507 USD).

Las cifras son más pequeñas para el resto: Eduardo Li (Costa Rica), 10.750 dólares; Ariel Alvarado (Panamá), 33.173 USD; Manuel Burga (Perú), 32.250 USD; Rafael Callejas (Honduras), 68.336 USD; Sergio Jadue (Chile), 12.587 USD; Brayan Jiménez (Guatemala), 2.000 USD; y Romer Osuna (Bolivia), 34.592 USD.

Estos montos se suman al dinero que la FIFA reclama en concepto de sobornos y otras maniobras ilegales, y que en total ya ascendería a más de 290 millones de dólares, teniendo en cuenta más de 190 millones incautados a exdirigentes y empresarios que se declararon culpables y más de 100 millones congelados por delitos de los acusados.

 

El documento presentado hace especial hincapié en la corrupción en la Concacaf y la Unión Centroamericana de Fútbol (UNCAF) en la venta de derechos de comercialización de partidos clasificatorios para la Copa del Mundo.

En ese sentido, la FIFA apunta contra los acusados por aprovecharse del "prestigio" de la copa del Mundo para "llevarse dinero y negociar sobornos" por cientos de miles de dólares.

La demandas dedica párrafos completos detallados sobre los supuestos delitos del costarricense Li, el nicaragüense Rocha, a los hondureños Hawit y Callejas, el salvadoreño Reynaldo Vasquez, los guatemaltecos Jiménez, Salguero y Héctor Trujillo, y el panameño Alvarado.

También hay una mención más general al "daño" provocado por la corrupción y sobornos de los exdirigentes de la Conmebol Napout, Burga, Del Nero, Figueredo, Marín, Osuna, Teixeira, Bedoya y Jadue.

Las causas en Estados Unidos por el escándalo de corrupción de la FIFA que estalló en mayo pasado y tuvo una segunda oleada de acusaciones en diciembre incluyen a 40 personas, la mayoría ex altos dirigentes del fútbol del continente americano, y dos compañías de marketing deportivo.

Trece individuos se han declarado culpables, aceptando cooperar con la fiscalía a cambio de una posible reducción de la pena, y 27 son actualmente juzgados.

Eduardo Li está bajo arresto domiciliario en Nueva York 

Luego de un largo proceso, el  martes 8 de marzo la Corte del Distrito del Este del estado de Nueva York envió la aprobación para que el exjerarca de la Fedefútbol pueda vivir en un departamento para cumplir su arresto domiciliario. Estuvo detenido desde el 27 de mayo 2014 en Suiza y Nueva York,

Como requisitos para obtener este beneficio, Eduardo Li portará un brazalete electrónico, el cuál monitoreará durante las 24 horas del día su ubicación exacta, su departamento cuenta con una vigilancia mediante cámaras de circuito cerrado, además de haber entregado su pasaporte al FBI.

 

Fifa acusa a Sudáfrica de pagar para obtener el Mundial 2010

La FIFA ha enviado una solicitud a la justicia estadounidense para recuperar las "decenas de millones de dólares" de sus antiguos directivos perseguidos en los Estados Unidos, en cuya investigación se basa para reconocer que Sudáfrica pagó para obtener los votos necesarios en la elección del Mundial 2010.

El organismo que preside el suizo Gianni Infantino presentó hoy estos documentos en un intento de recuperar decenas de millones de dólares que se embolsaron ilegalmente 39 miembros de la FIFA y otros oficiales de fútbol perseguidos por la justicia estadounidense por corrupción.

La FIFA, que se declara en dicha documentación "víctima", presentó una solicitud de restitución a la Oficina del Procurador de Estados Unidos y a la Oficina de Libertad Condicional de Estados Unidos para el Distrito Este de Nueva York, para que exija la indemnización por parte de los 41 exfuncionarios de la FIFA y otras organizaciones de fútbol, entre ellos Chuck Blazer, Jack Warner, Jeffrey Webb y otros que han sido acusados en la investigación que está en curso llevada a cabo por el Departamento de Justicia.

"Los acusados abusaron de los puestos de confianza que tenían en la FIFA y otras organizaciones internacionales de fútbol y causaron daños graves a la FIFA, sus asociaciones miembros y la comunidad del fútbol. El dinero que se embolsaron pertenecía al fútbol mundial y estaba destinado para el desarrollo y la promoción del juego. FIFA, como el órgano rector del fútbol, quiere que el dinero esté de vuelta y estamos decididos a conseguirlo sin importar el tiempo que sea necesario", dijo Infantino, nuevo máximo mandatario de la FIFA tras ser elegido el pasado 26 de febrero para relevar a su predecesor, Joseph Blatter, imputado por la justicia suiza.

La FIFA cree que decenas de millones de dólares fueron desviados de la comunidad del fútbol ilegalmente a través de sobornos, comisiones ilegales y esquemas corruptos llevados a cabo por los acusados. Esta cantidad es probable que aumente a medida que la investigación continúe.

La FIFA pide la restitución del dinero que los acusados se embolsaron para enriquecerse, así como los sueldos, prestaciones y bonos que percibieron durante su permanencia en la FIFA y otras organizaciones de fútbol.

La FIFA también reclama dinero por los daños causados debido a sus acciones sobre la marca FIFA y su reputación, su propiedad intelectual y sus relaciones de negocios.

Infantino entiende que los acusados se apropiaron también del dinero de los jugadores, entrenadores y aficionados de todo el mundo que se benefician de los programas que desarrolla la FIFA para promover el fútbol.

"Estos dólares estaban destinados a construir campos de fútbol, no mansiones ni piscinas; para comprar equipos de fútbol, no joyas y automóviles; y para financiar la cantera y el desarrollo técnico, no para suscribir lujosos estilos de vida. Cuando la FIFA recupere este dinero, se dirigirá de nuevo a su propósito original: para el beneficio y desarrollo del fútbol internacional"

Entre los documentos presentados por la FIFA, y respecto a Sudáfrica la FIFA entiende que se pagaron diez millones de dólares en sobornos a cambio de votos para la elección del país africano al trinitense Jack Warner, expresidente de la CONCACAF, y expresidente de la FIFA, así como a Chuck Blazer, exsecretario general de la CONCACAF, y un tercer miembro del comité ejecutivo.

Warner, que fue detenido y acusado por la justicia estadounidense de fraude y blanqueo de capitales, está en su país con una orden de extradición a Estados Unidos pendiente.

Blazer, suspendido a perpetuidad por la FIFA, renunció en 2013 porque estaba siendo investigado. Su confesión ha sido clave en la investigación. Es el origen de todo el 'caso FIFA'.

El organismo futbolístico universal explica en uno de los 22 folios de la petición que Warner y su familia habían establecido estrechos vínculos con Sudáfrica durante el intento fallido del país para ser sede del Mundial 2006, concedido finalmente a Alemania.

"Por ejemplo, Daryan Warner -hijo de Jack- había organizado una serie de partidos amistosos entre los equipos de la CONCACAF en Sudáfrica, apoyándose en la red de contactos allí de su padre".

"Daryan Warner también había servido como cobrador de su padre, viajando a un hotel en París, para recibir un maletín 10.000 dólares en efectivo de un funcionario del comité de la candidatura de alto rango de Sudáfrica e inmediatamente volver a Trinidad y Tobago para dárselo al acusado de Warner", apunta.

Y, así mismo, los responsables de Sudáfrica "ofrecieron un soborno más atractivo" de 10 millones de dólares a Warner, Blazer y a un tercer miembro del Comité Ejecutivo por su voto, para cuyo soporte se recurrió a una supuesta "diáspora africana" en la región del Caribe, "cuando en realidad se trataba de un soborno"