Rigurosa evaluación al trabajo de Guardiola en el City por France Football

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Publicado: Miércoles, 24 Abril 2019 10:09

Escrito por Redacción

La prestigiosa revista, France Football, le dedicó un artículo la técnico español Pep Guardiola, quien ahora tiene como principal objetivo ganar la Premier League luego del duro golpe que sufrieron en la Champions. 

Mientras Raheem Sterling pensó que había marcado el gol del rescate para las personas de cityzen en los segundos finales de este extraordinario partido de la Liga de Campeones de cuartos de final contra el Tottenham. 

El video, terminó rechazándolo por una posición fuera de juego de Agüero, y colmó las esperanzas de todo un estadio. En el espacio de unos minutos, Pep Guardiola vio el mundo desmoronarse en su boca. 

Después de haber dejado que se alegrara por lo que él creía que era el peón de la calificación, el catalán, aturdido, solo pudo arrodillarse en su área técnica y tomar la cabeza en sus manos. El fracaso es aburrido, doloroso. Sin embargo, después de una primera carrera, ir de ancho, Guardiola había entregado a su rebaño los medios de sus ambiciones. Pero eso no será suficiente para alcanzar las últimas cuatro de las competiciones de clubes más importantes.

Una supremacía nacional para consolidar

Después de ganar la Copa de la Liga y clasificarse para la Copa FA, el Manchester City esperaba lograr algo histórico: conseguir cuatro títulos en una sola temporada. Pero el sueño se ha derrumbado. Para suavizar este dolor, Pep Guardiola y sus hombres esperan ganar el Campeonato.

En una lucha con los Klopp Reds, los Cityzens tienen la oportunidad de gobernar solos en la tierra de la Reina. A pesar de cuatro derrotas en esta temporada, el Manchester City está con el objetivo intacto. Con un año 2019 por el momento sobresaliente, con trece victorias en la Premier League, habiendo eliminado a Liverpool (2-1) o al Chelsea (6-0). Los campeones defensores imponen su ley. Sólo una derrota ante Newcastle (2-1) ha empañado un récord casi perfecto.

Tras algunas dudas al comienzo Guardiola enderezó el rumbo. Su equipo, el fútbol tan dominado, encontró rápidamente el ritmo de la apisonadora. Con una lavandería bien pensada, tan eficiente, operada en particular por una primera línea de presión muy trabajadora, al Manchester City se le otorga un dominio de todos los tiempos y una dominación territorial asfixiante.

A fuerza de fijarse en las alas, reversiones, un juego de posición muy efectiva y juego en apoyo a la rendición, City ofrece control y arruina a sus oponentes. Un plan de juego lleno eficaz, que garantiza un gran poder para Cityzens en muchos de sus partidos. Con 33 goles marcados en 14 partidos y solo 6 concedidos, Manchester City tiene la mejor defensa del Reino detrás del Liverpool y se ha consolidado como la mejor ofensiva. Y, en esencia, la pata Guardiola surte efecto. 

Un viaje y estadísticas que hacen de la ciudad un ogro devorando todo a su paso. A excepción de la primera temporada difícil con el catalán en el banquillo, pero que ha servido para establecer una base sólida, el Manchester City ha hecho de la Premier League su campo favorito. La prueba es que, luego de su eliminación en los cuartos de final de C1 el miércoles pasado, el club encontró el sábado Tottenham y se llevó nuevamente al ascendente (1-0). Una forma de demostrar que la lesión sufrida tres días antes fue curada. Pero en Europa, y desde hace tres años, la realidad es bastante diferente. Las lesiones se acumulan. Un poco demasiado. Y se necesitará mucho más para tutelar los picos continentales.

Prudencia, conservadurismo y arrepentimientos

Si se divierten animando a sus oponentes uno por uno en Inglaterra, los Mancunianos están teniendo más dificultades en la Liga de Campeones. Como resultado, Guardiola y sus jugadores juegan con el freno de mano. Desde la toma del español en la ciudad, el club lucha por imponerse en la escena europea, especialmente en el exterior. En Lyon en la fase de grupos esta temporada, pero también en Mónaco en las eliminatorias de C1 en 2017, el Liverpool la temporada pasada en los cuartos de final y este año, ante el Tottenham, el Manchester City no pudo ganar. En el camino, el ex entrenador del Barça, conocido por sus planes de juego meticulosamente preparados, ya no sorprende. Y es muy problemático. Demasiado cauteloso, el catalán pierde parte de su identidad, tan marcada, y deja de correr riesgos. Casi no jugar más para ganar. Sin duda, por sus repetidos fracasos al frente del Bayern y el Manchester City en la Liga de Campeones, Guardiola es "culpable" de un conservadurismo que no lo conocía. De hecho, su equipo ronronea, y es culpable de muchos errores, errores técnicos inusuales. Si está acostumbrada a ganar, Guardiola se ha vuelto, en los últimos años, temerosa de perder.

Y extrañamente, es en estas situaciones que Guardiola, obsesionada por la cosa, pierde el equilibrio. Los tiempos débiles son cada vez más numerosos y especialmente mal administrados. " No jugamos con valentía. Siento que estamos demasiado nerviosos cuando se trata de los partidos más importantes "Ilkay Gündogan quedó eliminado después de perder en el partido de ida de cuartos de final contra el Tottenham (1-0). Luego, obligado a cambiar la situación a su favor, Pep Guardiola fue lanzado, como el año pasado contra los Rojos, en un juego pirotécnico ofensivo. El problema es que no siempre es fácil dominar una reunión y convertirse en un caos permanente. Al rechazar su plan de juego para evitar la derrota en el partido de ida, el catalán fue finalmente obligado a atacar. Excesivo. Y esto a expensas de sus defensores centrales, a menudo dejados a su suerte. Demasiado para anotar para volver a la puntuación, la Ciudad, muy a menudo, ofrecía por detrás.

En frente de Tottenham, la animación defensiva carecía cruelmente de seriedad y calma, dejando espacios entre las líneas indignas, a veces, en esta etapa de la competencia. Las brechas colectivas se vuelven demasiado numerosas. Y contra los londinenses, Laporte, presa del pánico, se hundió y se hundió en una espiral negativa encadenando los errores, y se encontró involucrado en las tres piezas opuestas. Así, Guardiola por su enfoque, se negó a jugar la mitad de la doble confrontación, dio la batuta para ser golpeado, ya que mientras golpeaba a su adversario, le ofreció, con la pérdida, también el campo para contraatacar.

Como resultado, sus hombres estaban a merced de un gol en el exterior. Lo que complica la tarea, sabiendo que Tottenham, como Mónaco hace dos años, plantó nada menos que tres. Los Cityzens, sin ser compactos, se encontraban a menudo a raya cuando aseguraban su profundidad pero también su anchura, dejando a menudo sus intercambios en una situación de igualdad numérica. El riesgo de error es entonces sólo diez veces.

En cuanto a los Stones en el partido de ida contra Jardim, fue demasiado complicado para la pareja Kompany-Laporte defender adecuadamente su área, al tiempo que vigilaba los movimientos de los oponentes. La Liga de Campeones no tolera ninguna brecha. La ciudad ha hecho demasiado. "Me perdí dos finales de la Liga de Campeones debido a las penalizaciones, fui una vez en la final al encuadrar un solo tiro, y otra vez, no fui después de 33 tiros al blanco". En este juego, es así ... Pierdes más de lo que ganas.Guardiola se justificó después de la eliminación de su familia. Es cierto que no está totalmente equivocado. En el Bayern, ante el Atlético, la eliminación de sus hombres no tuvo mucho (una sanción de Thomas Müller). Pero desde su llegada a la Ciudad, el doble campeón europeo con el Barça a menudo se ha perdido en su acercamiento a los partidos eliminatorios. Y si su última victoria final se remonta a ocho años. Candelabros, y puede que no sea una coincidencia ... 

Fuente: France Football