América no pudo ante Puebla y salió silbado del Estadio Azteca (0-0)

El equipo del América, rival de Saprisa en la Concacaf, está sufriendo en serio para hacer anotaciones. Puebla se plantó bien atrás y le sacó un valioso empate sin goles en el Estadio Azteca.

Si bien América tuvo más tiempo la pelota en su poder durante la primera mitad, nunca tuvo la idea para abrir a la férrea zaga poblana. El equipo del 'Profe' Cruz  se defendía hasta con ocho elementos de los embates enemigos.

En el esquema de Gustavo Matosas, Rubens Sambueza no pesa; el naturalizado mexicano se pierde en el medio campo como segundo contención y eso lo recienten las Águilas, pues pierden un hombre de creación.

Tres llegadas de peligro tuvo el América durante el primer tiempo. Darío Benedetto falló dos y una más Oribe Peralta. A las Águilas les cuesta hacer goles en esta era Matosas.

Puebla jugó al contragolpe y a los 31' estuvieron cerca abrir el marcador con un disparo de Matías Alustiza que alcanzó a desviar con muchos problemas Moisés Muñoz.

En el complemento, la Franja tuvo mayor protagonismo, se animó a ir al frente pero no ocasionó peligro en el arco de Moisés Muñoz. América sufrió para ir al frente y Benedetto otra vez falló una opción clara, en un testarazo que sacó Rodolfo Cota en el ángulo.

Matosas hizo cambios para robarle la pelota a la visita, metió a Osvaldo Martínez para fortalecer el medio campo y debutó a Carlos Camacho intentado que el joven con velocidad llegara por la banda derecha, pero la las Águilas carecieron de idea.

Ante el pobre espectáculo del América y la inoperancia de sus delanteros para anotar, la afición pidió la entrada de su ídolo, Cuauhtémoc Blanco, a quien corearon y se rindieron ante él cuando entró a la cancha sin importar que portaba la casaca del rival.

Los últimos minutos tuvieron tintes dramáticos. En una jugada a balón parado Pablo Aguilar remató a segundo poste mandando el balón a las redes, pero lo hizo con la mano y su anotación fue anulada.

América suma dos juegos sin anotar y sin ganar; la era Matosas comienza a tener sus complicaciones donde ya no le sirve el discurso de jugar ofensivamente, su afición quiere goles y el duelo ante Tigres